Atentados. Un iraquí inspecciona un coche calcinado tras un atentado en el barrio de Al Karrada, en Bagdad.
Una serie de bombas estallaron en barrios predominantemente cristianos, dejando 6 muertos y varios heridos, apenas dos semanas después que extremistas sitiaron una iglesia y mataron a 58 personas, 56 de ellas cristianos.
La Policía dijo que al menos 11 bombas al pie de calles estallaron en espacio de una hora en tres áreas predominantemente cristianas en el centro de Bagdad. Cuatro de las explosiones se produjeron junto a casas de cristianos, y además dos obuses cayeron en enclaves cristianos en el barrio suní de Dora, en el sur de la capital. Dos bombas colocadas en viviendas cristianas vacías en el oeste de Bagdad destruyeron dos casas.
Fue el tercer ataque contra cristianos desde el sitio a la iglesia el 31 de octubre. El martes por la noche, una serie de bombas estallaron junto a tres casas vacías pertenecientes a cristianos en el occidente de Bagdad, pero nadie resultó herido. La semana pasada, un grupo vinculado con Al Qaeda se atribuyó responsabilidad por el ataque a la iglesia y amenazó con la violencia contra la comunidad cristiana iraquí.
La amenaza dejó a muchos cristianos en el país preguntándose si no es tiempo de irse. "Estábamos aterrorizadas por las explosiones", dijo Juleit Hana, una cristiana de 33 años que vive en uno de los barrios afectados por los ataques de ayer. Estaba desayunando con su hija cuando estallaron las bombas. Hana dijo que se va a ir del país.
"No vale la pena quedarse en un país en el que el Gobierno no te puede proteger ni siquiera cuando estás sentada en tu casa".
Los nuevos ataques ocurrieron en momentos en que la minoría cristiana en Irak sigue consternada por la masacre en la principal catedral católica en Bagdad, el peor contra cristianos en el país desde que la invasión estadounidense del 2003 desató una ola de violencia sectaria.
Papa apoya a unión heterosexual
El papa Benedicto XVI resaltó el afecto que recibió en España, dijo que Santiago de Compostela sigue siendo un punto de referencia para una Europa "fiel a sus imprescindibles raíces cristianas" y reiteró su apoyo al matrimonio heterosexual y su oposición al aborto y la eutanasia.
Benedicto XVI señaló que "todo lo que se haga" para ayudar al matrimonio entre un hombre y una mujer, a la familia y a las personas necesitadas y para acrecentar la grandeza del hombre y su inviolable dignidad "contribuye al perfeccionamiento de la sociedad" y que "ningún esfuerzo en ese sentido es en vano".
El Pontífice declaró esto ante miles de fieles en El Vaticano a la audiencia pública de los miércoles, en la que habló de su visita a España, donde este pasado fin de semana visitó Santiago de Compostela y Barcelona.
El Papa aseguró que es la fe en Cristo "la que da sentido a Santiago de Compostela, un lugar extraordinario" que continúa como "punto de referencia para la Europa de hoy en su nueva configuración y perspectiva".
Agregó que tiene esperanza en las "inmensas posibilidades del continente europeo" y en su futuro y que por eso invitó a Europa "a abrirse siempre más a Dios, favoreciendo las perspectivas de un encuentro, respetuoso y solidario con las poblaciones y las civilizaciones de los otros continentes".
PERSONAS
Murieron durante los ataques en Bagdad.
Vaticano expresa dolor
El secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, expresó hoy su dolor por varios atentados contra objetivos cristianos en Irak que dejaron varios muertos y pidió al gobierno de ese país proteger a esa minoría religiosa.
En declaraciones a la prensa, tras una conferencia en Roma, el máximo exponente político de la Sede Apostólica después del Papa reveló que la tutela a los cristianos "ya fue abordada con las autoridades" iraquíes y dijo esperar que "sea tomada en consideración".
"Es un sufrimiento indescriptible el de las comunidades cristianas esparcidas por el mundo y en este momento sobre todo en Irak, pero pensamos también a otros países como Pakistán".
Calificó de "muy dolorosos" los atentados de las últimas horas contra domicilios cristianos en Bagdad, que dejaron seis muertos y más de 30 heridos, y aseguró que El Vaticano reflexiona sobre el "grave problema" de las persecuciones religiosas.
La violencia contra los cristianos se ha recrudecido en las últimas semanas, apenas el 31 de octubre pasado una toma de rehenes en una iglesia siro-católica de la capital iraquí dejó como saldo más de 50 personas muertas, entre ellos dos sacerdotes.
Un día después, el 1 de noviembre, Benedicto XVI condenó el episodio y urgió a la comunidad internacional a unir fuerzas para finalizar la "absurda violencia" en Medio Oriente.
