Legado. El edificio de la Primaria 18 deMarzo se ha convertido en patrimonio de la nación y es cuidado y preservado por el Instituto Nacional de Bellas Artes.
Los murales
Que dan riqueza
A las paredes
De esta legendaria escuela son creación de Francisco Montoya, Manuel Guillermo
De Lourdes
Y Horacio
Rentería Rocha
El edificio con el que cuenta la escuela primaria del Instituto 18 de Marzo es un legado para los niños que asisten a ella y en general para Gómez Palacio.
En ella se pueden encontrar diversos murales en sus pasillos y paredes, que marcan la importancia de la época, en la cual se creó esta institución, que en aquel tiempo, de 1930 a 1940, cubrió una necesidad grande para los estudiantes de este municipio.
MARCANDO EL INICIO DE UNA HISTORIA Los primeros que se pueden observar a la entrada de la escuela son obras del pintor mexicano Francisco Montoya de la Cruz, con temas relacionados con la expropiación petrolera y el General Lázaro Cárdenas, que era lo que se estaba viviendo en esa época.
De hecho, la fundación de dicha institución académica fue en ese tiempo, el 23 de junio de 1940 y por tal motivo fue bautizada con el nombre de "Instituto 18 de Marzo".
MANO DE OBRA NACIONAL Los trabajos murales fueron elaborados por manos 100 por ciento mexicanas, además de Montoya, los maestros del arte que fueron partícipes de este legado fueron Manuel Guillermo de Lourdes y Horacio Rentería Rocha.
Todos ellos dejaron un legado importante no sólo para esta institución y estos niños, sino para todo el país.
TEMAS MUY MEXICANOS
Las temáticas de los murales eran principalmente enfocadas a los temas de agricultura, acerca de la Escuela Rural Mexicana, plasmando en las paredes la labor de la siembra y recolección, básicamente del algodón, antes típico de la Región Lagunera, las jornadas campesinas y los puentes de La Laguna.
En ese tiempo después de una ardua jornada laboral se reunían todos a fumar y a descansar un poco, además de platicar y debatir sobre todo lo relacionado con la labor, esto también está plasmado en las paredes de la 18 de Marzo.
Asimismo, la educación y dedicación de la familia mexicana y del hombre que labraba la tierra, que era la manera de vivir del mexicano y del lagunero, se aprecia en los muros.
También se encuentra en uno de estos murales, que se ubica justo arriba de la puerta de la dirección, el escudo del estado de Durango.
Otros muestran la filosofía, las corrientes que en aquel entonces Cárdenas promovía que era el positivismo y a la que muchos mexicanos se unieron.
Por otra parte, en la dirección del turno vespertino cuentan con más de esta historia; también fueron plasmadas las fantasías de Charles Perrault con cuentos como la Caperucita Roja, que es uno de los más representativos, además del clásico de Miguel de Cervantes Saavedra, el Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha.
Esta es una de las áreas de las favoritas de los pequeños estudiantes gomezpalatinos de la 18, porque contiene los murales más atractivos para ellos, ya que son obras únicas en su estilo.
RECUPERAN LA BELLEZA DEL LEGADO Estos murales fueron restaurados en el año 2000 por personal especializado del Instituto Nacional de Bellas Artes, INBA, con la técnica de planchado, ya que el texturizado estaba levantado.
Fue declarado patrimonio de la nación, pertenece ahora al INBA y cualquier modificación, reparación o uso que se quiera hacer de él debe tener previa autorización de dicha institución.
UNA GRAN HISTORIA El edificio fue el primero que tuvo el Instituto 18 de Marzo. Contaba con preescolar, primaria, secundaria y preparatoria, había talleres de costura, carpintería y otros, además de alberca donde recibían clases de natación.
Fue creado gracias a una gran lucha de varias personas incluyendo los estudiantes, quienes tenían que ir hasta el municipio de Torreón: en ese entonces los preparatorianos iban a la Preparatoria Venustiano Carranza y muchas veces pelearon por tener un lugar donde estudiar en el municipio de Gómez Palacio.
En ese tiempo todos compartían el mismo edificio, las necesidades fueron cambiando poco a poco y ahora sólo los más pequeños ocupan el lugar.
Según la maestra Teresa Favela, directora de la primaria, muchas historias surgen y son recordadas por los mismos ex alumnos, algunos ya con varias décadas de vida, que siguen visitando su querido plantel y que ven con gusto que conserven la tradición de los murales y los mantengan en buen estado a través de las generaciones que pasan por la primaria del Instituto 18 de Marzo.
