Situación. Los impuestos, incrementos a impuestos y a combustibles tienen en riesgo a este sector.
El transporte de carga pesada y de pasajeros está al borde de la quiebra, pues el constante incremento al precio de los combustibles y refacciones está cerca de convertir esta actividad como incosteable.
MEJOR SE VAN
Cuauhtémoc Ibarra Gómez, secretario general de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) en Durango, aseguró que el 60 por ciento de los transportistas dejó la actividad buscando otras opciones, incluso emigrando a Estados Unidos, "con todo lo que esto implica de pulverización de la estructura familiar".
LOS MÁS AFECTADOS
La CROC aglutina a 400 conductores de camiones de carga pesada, 100 areneros y otros 300 transportistas de pasajeros en municipios de Durango. Ibarra Gómez enfatizó que el hecho de absorber los incrementos registrados en los últimos 13 meses ocasionó repercusiones negativas que los colocan "en una posición franca de incosteabilidad y de posible quiebra".
Detalló que el transporte de carga pesada es el que más ha sido golpeado con los nuevos impuestos como el Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) y el costo del combustible.
Sin embargo, resaltó que el transporte de pasajeros también ha sido golpeado porque en forma "oculta" ha habido aumentos constantes a las refacciones, llantas y lo que es indispensable para la operación adecuada de las unidades. "Es grave la situación que se viene dando", advirtió Ibarra Gómez.
DEBE HABER EQUILIBRIO El líder de la CROC en Durango explicó que una forma de ayudar a la economía de los propietarios y conductores del transporte de pasajeros es regular las tarifas del pasaje, pues también deben cumplir con el sustento económico de sus familias.
"A la autoridad la entiendo, tiene que dar justificación a la sociedad porque indudablemente el incremento del transporte le pega al usuario en su bolsillo. Pero tampoco puede mantener la estructura del transporte sujeta a este proceso negativo económico, porque se puede caer", reconoció el líder sindical.
Pero advirtió que se si cae esta estructura, que ha servido para el desarrollo económico de Durango, también caerá el desarrollo de las familias que viven del sector del autotransporte de pasajeros, incluyendo a los dueños y choferes de taxis.