Foto: LA I
Con varios impactos de bala fueron encontrados dos cadáveres en un paraje del ejido Los Ángeles, de Lerdo, ayer en la mañana.
Ultimados
Fue alrededor de las 10:30 de la mañana cuando se informó que en el camino ejidal que conduce de Los Ángeles a Las Piedras, a un costado del Río Nazas, se encontraban dos cuerpos desde la madrugada.
Personal ministerial de la Subprocuraduría de Justicia de La Laguna de Durango, acompañado de policías municipales de Lerdo, acudió al lugar para tomar conocimiento del hallazgo y ordenar el traslado de los cuerpos al anfiteatro del Servicio Médico Forense, en donde se les practicó la necropsia de ley, que arrojó como resultado que fallecieron a consecuencia de hemorragia causada por heridas de arma de fuego.
Además se informó que debido al estado en el que se encontraban los cuerpos tenían más de seis horas de ser asesinados.
En el lugar fueron localizados y asegurados cuatro casquillos percutidos calibre 45, los cuales fueron llevados a la Subprocuraduría para realizar los estudios periciales para integrar la averiguación.
Los buscaban
A primeras horas de la mañana, varias personas acudieron a la Subprocuraduría de Justicia debido a que desde la noche del pasado sábado un grupo de personas se llevó a la fuerza a dos de sus familiares y no habían regresado, en el reporte de desaparición se tomaron las características de los desaparecidos para empezar con la búsqueda.
Después de realizar la necropsia a los cadáveres que fueron localizados en el paraje del ejido Los Ángeles, se informó que las características de estos eran las mismas que de las personas desaparecidas por lo que se solicitó la presencia de algunos de los familiares en la Agencia Estatal de Investigación para despejar cualquier duda sobre la identidad de los fallecidos.
Nuevamente, pero ahora ante el Ministerio Público, las personas describieron a sus familiares desaparecidos. Las características coincidieron con las de los occisos y al presentarles las imágenes se corroboró que eran los hermanos desaparecidos, de nombres Leopoldo Ruiz Castrejón, de 30 años; y David Ruiz Castrejón, de 26 años, con domicilio en la colonia 20 de Noviembre de Lerdo.
A decir de los familiares, los dos occisos eran obreros y no eran personas de pleitos, por lo que se les hizo inusual que no volvieran y comenzaron a buscarlos, sin imaginar que los encontrarían así.
