Batopilas será sustentable

A pocos pasos están de alcanzar la sustentabilidad deseada. De cinco ejidos colectivos que siguen operando en Francisco I. Madero, el de Batopilas es quien presenta los mayores avances para lograr que una comunidad de 270 familias logre, por fin, concretar su proyecto de sustentabilidad.

El proyecto es muy ambicioso, pero alcanzable, ya que contempla no sólo aumentar la producción de leche bovina y producir con mejores rendimientos los forrajes, sino el autogenerar su propia electricidad y el excedente generado venderlo a CFE una vez que se firme un convenio y se instale un medido de doble flujo.

La idea propuesta no sólo busca ahorrarse 45 mil pesos mensuales en el pago de la luz en los establos, sino el que los hogares de 270 familias dejen de pagar su electricidad y ser la primer comunidad de La Laguna que produce leche fresca en mayores volúmenes por vaca, pero sin contaminar, con perspectivas de un crecimiento económico y el ser una comunidad sustentable.

La oportunidad llegó y se presentó en 2004 al construirse una nueva nave para colocar inicialmente 300 vacas. En 2006 iniciaron los trabajos del biodigestor , con el cual se resolvieron varios problemas de un solo golpe: terminar con la contaminación que generan las excretas de las vacas, elevar la productividad y calidad en la leche de vaca, autogenerar la electricidad que se consume en el establo y salas de ordeñas, producir fertilizante orgánico, cultivar forrajes con un mayor rendimiento.

Con estas medidas, la cifra de ganado aumentó a 500.

En 2007 comenzaron a producir la energía y a finales de 2009 se logró consolidar la sincronía con la CFE, por lo que están a la espera de que se instale un medidor de doble flujo y lograr comercializar la energía excedente.

Para ello, los ejidatarios solicitarán un convenio mediante el cual se permita al ejido vender la electricidad a la propia CFE, al igual que lo hacen grandes compañías extranjeras en nuestro país.

 LO QUE LES DA LUZ

En un recorrido realizado al ejido se encontró que lo más relevante y nuevo del proyecto se encierra en un pequeño espacio de varios metros cuadrados en donde se encuentran los 2 motores que transforman el gas del biodigestor en energía.

Al encenderse se produce un fuerte ruido, pero que da pie a la generación de la energía que es utilizada no sólo para alumbrar el establo con 500 vacas, sino la sala de ordeña y algunas luminarias más del área.

Humberto Campillo R onquillo, consultor agropecuario junto a Librado Guardado, encargado del biodigestor, recordaron que anteriormente se quemaba el gas, sin embargo, con la compra de los motores se logra ahora producir la energía sin contaminar el medio ambiente.

Mostrando el medidor de energía, técnicos especializados nos explicaron que en esos momentos el establo y la sala de ordeña estaban siendo operados con la energía que se producía con el biodigestor.

Indicaron que hoy en día han logrado la sincronía con la CFE, lo cual les permite estar al mismo nivel de voltaje y frecuencia con la paraestatal e iniciar, en breve, mediante un medidor de doble flujo la venta a la paraestatal de la energía excedente.

Dijeron los especialistas de la firma Jidoka que por el momento buscan dejar el medidor en ceros para dejar de pagar los 45 mil pesos mensuales que pagaban de recibo de luz, ya que no les conviene estar consumiendo la energía de la paraestatal si pueden autogenerarla. La capacidad instalada es de 140 kilowatts/hora, sin embargo, las necesidades de consumo hoy en día se estiman entre 40 a 45 kilowatts/hora.

De acuerdo al consultor agropecuario, lo que falta es hacer modificaciones a la Ley para que se les permita a los mexicanos, a pequeños ejidos, el poder vender excedentes de energía sin la necesidad de ser grandes empresas nacionales o extranjeras al utilizar sistemas que produzcan energía renovable, ya sea por celdas solares o gas.

Apuntó que la propuesta ya fue presentada a senadores, por lo que les toca a ellos realizar las modificaciones correspondientes a la Ley, lo cual permitirá un mayor crecimiento del sector social en México utilizando energía renovable para no contaminar.

Lamento que organismos como Firco no hayan volteado a estos 5 ejidos colectivos para recibir apoyos en 2009 y lograr la sustentabilidad deseada, ya que a los biodigestores construidos y que están en operación les hacen falta otros equipos para operarlos al 100 por ciento de su capacidad instalada.

Refirió el caso de Batopilas, en donde requieren de malla y agitadores. La inversión estimada es de 1.5 millones de pesos.

En 2009 se habla que se dieron 40 apoyos en La Laguna para construir biodigestores, sin embargo, pese a que fueron los primeros en presentar la solicitud, los ejidos colectivos de Francisco I. Madero no recibieron respuesta alguna, sólo se apoyó a la pequeña propiedad.

La estimación hecha es de 8.2 millones de pesos la inversión que demandan estas 5 comunidades, las cuales lograron concretar y alcanzar la sustentabilidad económica deseada.

140

 KILOWATTS

Hora es la capacidad instalada del biodigestor

5 proyectos en La Laguna

Humberto Campillo Ronquillo, consultor agropecuario, reconoció que existen 5 proyectos que buscan la sustentabilidad en ejidos colectivos de Francisco I. Madero, con etapas de avance diferenciada en Batopilas, El Cuije, Las Vegas, El Manantial y El Fresno, siendo el primero de éstos quien está próximo en alcanzar su sustentabilidad, con lo cual la comunidad tendrá mayores posibilidades de crecimiento y de mejorar su calidad de vida.

En una visita hecha a este ejido la semana pasada se logró ver que algo que parecía una buena propuesta en papel es para la fortuna de los laguneros una realidad. Un gran número de hectáreas están sembradas con alfalfa y otras próximas se prepararán para la siembra. Se menciona que gracias al uso del agua del biodigestor y del fertilizante orgánico, el rendimiento en cultivos se ha elevado, por lo que se ve un gran número de hectáreas que producen el alimento para 500 vacas.

Actualmente la producción es de 14 mil 800 litros diarios, por lo que cada vaca produce 29.6 litros al día. En contraste, otros ejidos, que apenas se inician en este proceso de sustentabilidad, reportan a lo mucho una productividad de 22 litros diarios, con 200 cabezas.

Las mil 200 familias que pertenecen al ejido Batopilas y que han logrado integrarse poco a poco a las actividades de cultivo de forrajes y producción de leche han visto un aumento en los rendimientos, ya que de 300 vacas que se tenían, la cifra actual es de 500 y con la meta de alcanzar a 600.

¿Qué es?

Definición del biodigestor

⇒ Es, en su forma más simple, un contenedor cerrado, hermético e impermeable (llamado reactor), dentro del cual se deposita el material orgánico a fermentar (excrementos de animales y humanos, desechos vegetales-no se incluyen cítricos ya que acidifican-, etcétera) en determinada dilución de agua para que se descomponga, produciendo gas metano y fertilizantes orgánicos ricos en nitrógeno, fósforo y potasio.

⇒ El biodigestor es un sistema sencillo de implementar con materiales económicos y se está introduciendo en comunidades rurales aisladas y de países subdesarrollados para obtener el doble beneficio de conseguir solventar la problemática energética-ambiental, así como realizar un adecuado manejo de los residuos tanto humanos como animales.

Biodigestor: estiércol de vacas hecho energía: El ejido Batopilas es pionero en el uso del biodigestor, donde la energía generada sirve para la operación de la sala de ordeña y el establo para 500 vacas. (Video de El Siglo de Torreón)