Seguridad. Los invitados debían pasar por un detector de metales al ingresar al Coliseo Centenario. EL SIGLO DE TORREÓN / RAMÓN SOTOMAYOR
Los más de nueve mil asistentes que acudieron al Informe del gobernador Humberto Moreira estuvieron resguardados por un fuerte cerco de seguridad que abarcó hasta la entrada de Gómez Palacio.
Guillermo Flores, comandante de la Policía operativa del Estado, explicó que participaron más de 300 elementos de esta corporación para dar seguridad al evento.
Señaló que se coordinaron tanto con la Policía Federal de Caminos como con la Policía Municipal, además de la Dirección de Tránsito y el Ejército Mexicano, a fin de blindar los puentes y todos los accesos al Coliseo.
La Estatal tuvo a su cargo el acceso perimetral al recinto, apoyados por Vialidad, sin embargo, el comandante reconoció que se generó un caos vial considerable debido al cierre del tramo que pasa por el Coliseo Centenario.
"Pero no había otra medida, tuvimos que hacerlo así", expresó Flores.
En el estacionamiento se colocó una torreta de vigilancia y cada gobernador llegó escoltado por patrullas.
Humberto Rodríguez, coordinador regional de Protección Civil, explicó que en el cerco de seguridad participaron todas las corporaciones policiacas, bomberos e incluso la Secretaría de Salud, que atendió a algunas personas, a quienes les bajó la presión durante el evento.
En el interior se desplegaron brigadas de ataque rápido para contrarrestar cualquier incendio y en el exterior había unidades en puntos estratégicos para atender las contingencias, sin embargo se reportó saldo blanco.
"A algunas personas les bajó la presión por el exceso de cansancio, venían desde Piedras Negras, y por el tumulto de gente, pero fue todo", manifestó Rodríguez.
"Todo está bajo las especificaciones para que prevalezca la seguridad", indicó. En total fueron 20 elementos de Protección Civil estatal, 20 del Municipio y 30 bomberos.
