En la entrevista que concedieron a Caras, hablan de su familia, su boda, y del cómo se fueron forjando como novios y luego como familia.
Esta semana salió en la portada de la revista Caras, la pareja conformada por el gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, y la actriz, Angélica Rivera, donde en una entrevista hablan de su relación y de su próxima boda, luego de más de dos años de noviazgo.
En la entrevista resalta el hecho de que están ellos y sus seis hijos, tres de ella Sofía, Fernanda y Regina; y tres de él, Paulina, Enrique y Nicole. Destaca la publicación que la relación no es un montaje, “sólo amor y cariño auténtico”, además de detalles durante la sesión, donde demostraron amarse y amar a su familia.
Angélica Rivera define a Enrique Peña como un hombre sencillo y caballeroso, y menciona cómo fue aquel 16 de diciembre de 2009, donde él le dio el anillo de compromiso y el Papa le dio su bendición.
Hace unas semanas, en una entrevista que concedió Rivera a W radio, comentó que en 2011 regresaría a las telenovelas, pero en esta ocasión dijo que aunque estaba orgullosa de haber trabajado en Televisa durante 20 años, había decidido no trabajar más para la empresa, y dedicarse de lleno a su familia y las actividades de su novio.
Por su parte, Enrique afirmó que sabía de ella, pero no de su carrera, pues es ajeno a ese medio. Confirmó que se trataron después de que ella fuera la imagen del estado de México y que el cortejo se dio natural hasta que se enamoraron.
Enfatizó que se casa este año para evitar un momento político, y que la competencia se aproveche de eso.
Sobre la boda
La boda se llevará a cabo el 27 de noviembre en la catedral de Toluca, y habrá una recepción en la Casa de Gobierno, donde estarán, a decir de la actriz, “los que quieran acompañarnos”.
Macario Jiménez es el diseñador de su vestido, mexicano y sencillo. Los niños formarán parte de todo, de la entrega, del lazo y de los anillos.
Los dos hablaron de la posibilidad de tener un hijo de ambos, por lo que podría ser pronto, además de que de acuerdo con Peña Nieto “sellaría la relación de amor y se convertiría en un vínculo de las dos familias”.
Peña dejó claro que no está nervioso por el paso que van a dar, y no piensan en si les va a ir bien, sino que se casan porqué les va bien.
