La bancada del PRI en el Senado de la República prepara una reforma de decreto que contendrá un plazo para que el Ejército regrese a sus cuarteles.
El proyecto incluirá dos condicionantes para que la Secretaría de la Defensa Nacional se mantenga un año y medio más en las calles en actividades contra la delincuencia organizada.
Además, ante cualquier presunta violación a los derechos humanos y garantías, los militares involucrados deberán someterse a tribunales civiles.
Los priistas plantean que durante el plazo de año y medio las policías estatales y federales se capaciten y se renueven, para tomar el papel del Ejército en la lucha contra el narcotráfico.
Fuentes de primer nivel del PRI en el Senado informaron que la propuesta es estudiada por la bancada. El documento se inscribe en las acciones para reformar la Ley de Seguridad Nacional, que envió el presidente Felipe Calderón al Senado.
En la reforma -atorada en el Senado- el Ejecutivo plantea un esquema legal para que el Ejército pueda actuar en casos de emergencia nacional.