Foto: REDACCIÓN LA I
Un salvadoreño y un hondureño en compañía de dos laguneros fueron detenidos por la Policía Municipal de Torreón al ser descubiertos cuando realizaban una llamada de extorsión.
Reportan testigos
Varias llamadas recibidas de manera anónima en el Centro de Control de Crisis (C3) alertó a la Policía Municipal de Torreón sobre un grupo de hombres que realizaban llamadas de extorsión desde un teléfono público ubicado en el bulevar Rodríguez Triana, al sur de Torreón.
Los testigos lograron interceptar al operativo de la corporación Municipal para señalar a los presuntos extorsionadores, los cuales se encontraban en el teléfono público del bulevar Triana a la altura de la calle Gómez Palacio, de la colonia Las Julietas.
Sin embargo, al observar que se acercaban las patrullas, los sujetos se echaron a correr, pero metros más adelante, los oficiales lograron su detención.
Efraín Riva Rey, de 36 años, de origen salvadoreño, Mario Ricardo Ponce Morales, de 21, de origen hondureño, así como Amador Ramírez Román, de 26 años, vecino del ejido Santo Niño Aguanaval, de Matamoros y Manuel Adán Espino, de 25 con domicilio en Las Julietas, fueron capturados como los extorsionadores.
Ante su captura, Efraín y Mario Ricardo comentaron que eran inmigrantes, que semanas antes habían conocido a Amador y Manuel que están desempleados y decidieron intentar extorsionar a algunas personas para obtener dinero y poder comer. Mientras que Amador y Manuel decidieron hablar sólo ante el Ministerio Público.
Asimismo, a los detenidos se les aseguraron dos tarjetas de teléfono de 30 pesos cada una.
Auxilia Migración
Por suerte, ninguno de sus intentos tuvo éxito, por lo que los cuatro presuntos extorsionadores no tuvieron cargos y no fueron procesados por dicho delito, además de que no hubo denuncia formal, sólo el señalamiento de algunos testigos, que escucharon al momento en que los hombres hablaban por teléfono y hacían amenazas.
El salvadoreño y el hondureño fueron puestos a disposición del Instituto Nacional de Migración de Torreón, por lo que fueron trasladados la mañana de ayer a las instalaciones del Palacio Federal, en donde les darían alimento y comenzarían el trámite para su deportación a sus países.
Sin embargo, Amador y Manuel Adán fueron puestos en libertad, debido a que no había cargos en su contra ya que no lograron obtener dinero.
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