Nueve soldados de la OTAN murieron el martes cuando se estrelló su helicóptero en el sur de Afganistán, en una región donde las tropas de la alianza atlántica están aumentando la presión sobre los insurgentes talibanes. Ya es el año más mortífero para las fuerzas internacionales en la guerra que comenzó hace casi nueve años.
Se trató del peor accidente de helicóptero que hayan sufrido las fuerzas de la coalición en cuatro años en el país, donde los helicópteros son muy usados para el transporte de tropas dispersas en un terreno montañoso con pocos caminos.
Había un "elevado número" de estadounidenses entre los muertos, según un alto jefe militar en Washington, que habló con la condición del anonimato debido a que no todos los familiares han sido notificados. Agregó que no estaba claro si había muertos de otras nacionalidades. Un soldado afgano y un civil estadounidense resultaron heridos.
La OTAN dijo que la causa del accidente está bajo investigación, pero que no había informes de fuego enemigo. Sin embargo el portavoz del Talibán, Qari Yousef Ahmadi, dijo a la Associated Press por teléfono que los insurgentes derribaron el helicóptero. El hecho ocurrió en la provincia de Zabul.
En lo que va del año, 525 soldados estadounidenses y efectivos de la OTAN han muerto en Afganistán, en comparación con 504 en el 2009.
Mohammad Jan Rasoolyar, un portavoz del gobernador provincial de Zabul, dijo que el helicóptero cayó en el distrito de Daychopan.
Asimismo el martes, un misil presumiblemente estadounidense mató a siete presuntos milicianos en la provincia afgana de Paktika, dijeron tres funcionarios paquistaníes de inteligencia. La provincia es fronteriza con la región tribal paquistaní de Waziristán del Sur, un bastión de los milicianos que el ejército de Pakistán ha tratado de despejar.
La CIA suele lanzar ataques con misiles contra grupos insurgentes pero en su mayoría en la zona tribal paquistaní, una zona semiautónoma y anárquica fronteriza con Afganistán.
Dos de los tres agentes de inteligencia dijeron que los milicianos muertos el martes pertenecían a un grupo insurgente encabezado por Maulvi Nazir. Se cree que éste tiene un acuerdo con las autoridades paquistaníes de dejarlo tranquilo siempre y cuando sus hombres eviten atacar en suelo paquistaní.
Los oficiales dijeron que los milicianos acababan de entrar en territorio afgano cuando los proyectiles hicieron impacto en su vehículo en el área de Khand Narai en Paktika. Sus cadáveres fueron trasladados a Waziristán del Sur. Los agentes hablaron con la condición del anonimato por no estar autorizados a hablar con la prensa.
