Peligrosas. Las carreteras a las zonas rurales de Matamoros están en pésimas condiciones. EL SIGLO DE TORREÓN / EDITH FRAIRE
Luego de que el alcalde anunciara la recta final de las 100 acciones, se puede observar el completo abandono en el que se encuentran las carreteras que conectan a las comunidades rurales tanto del sur como del norte con la cabecera municipal.
Vecinos de los ejidos Corona, Solima y Benito Juárez, comentaron que el estado de las carreteras comenzó a notarse 6 meses después de haber sido reparadas. Sin embargo, al consultar con funcionarios de la anterior administración, señalaron que hace dos años sólo se reparó la carretera que va de Matamoros a Coyote, que pasa por el ejido La Partida, de Torreón.
Los problemas de baches y hasta de carpeta asfáltica falsa y suelta se encuentran en la carretera Matamoros-Coyote, la que va a Filipinas y no se diga a Mieleras, ya que se debe de circular a 40 kilómetros por hora, máximo; no porque los límites se respeten y se tengan instalados varios bordos, sino por la infinidad de baches que hay.
Vecinos del ejido Solima, que todos los días tienen que salir en sus vehículos o transporte público, comentan que al dirigirse a realizar sus compras tanto a Madero como a la cabecera municipal tardan hasta 30 minutos, debido a que los baches no les permiten circular a una velocidad moderada, sino que tiene que ser completamente lenta, para no dañar los vehículos.
"Los únicos que pasan a toda velocidad tanto por los baches como al sube y baja, son los patrulleros y los camioneros, ya que no son sus muebles los que van tripulando", dijo Martha Castruita, vecina de la comunidad de Corona.
Al circular de La Partida a Matamoros, entre el ejido Corona y Benito Juárez, los conductores pueden disfrutar de un sube y baja, por la irregularidad en la que se encuentra la carretera. Las autoridades comentaron que esa deformación de la carpeta asfáltica se debió a la gran cantidad de vehículos pesados que por ahí circula. Sin embargo, un grupo de ingenieros señalaron que se debe a la falta de compactación de la tierra.
Al sur, en la carretera a Mieleras y a Filipinas, los caminos no han sufrido ninguna reparación desde hace 4 años. Según vecinos de la comunidad de Santo Niño Aguanaval, la carretera ya no tiene baches, sino pozos, por lo que muchas veces los vehículos tienen que tomar parte del acotamiento para poder continuar el camino.
Para este año, la Dirección de Obras Públicas no tiene contemplado el embellecimiento de estas carreteras.
