Grecia permanece hoy sumergida en un caos y protestas callejeras por una nueva huelga general convocada por los principales sindicatos del país, en rechazo al plan de austeridad y reformas a pensiones y seguro social adoptadas por el gobierno.
El paro nacional, el sexto en lo que va del año, fue convocado por la Confederación de Trabajadores de Grecia (GSEE), que agrupa a trabajadores del sector privado, y la Confederación de Funcionarios Públicos (ADEDY).
Los medios de comunicación griegos también participarán en la huelga de 24 horas, según un reporte de la agencia oficial de noticias de Grecia ANA, que anunció anticipó que no emitira ninguna noticia hasta mañana miércoles a las 06:00 horas griegas (03:00 GMT).
La suspensión general de labores provocó caos en los transporte marítimo y público de Atenas y otras ciudades del país, afectando a miles de usuarios que quedaron varados, mientras que decenas de vuelos han sido cancelados o aplazados para más tarde.
Escuelas, oficinas de gobierno, pequeños comercios y hasta grandes centros comerciales también mantienen sus puertas cerradas, en tanto los hospitales públicos sólo atienden casos de emergencia, debido a que médicos y enfermeras respaldan la nueva huelga nacional.
A la par del paro de labores, miles de personas salieron este martes a las calles para expresar su rechazo a la mediadas de austeridad del gobierno, provocando serios enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, que desde temprano desplegadas para evitar las protestas.
Medios informativos internacionales reportaron que la policía griega reprimió con gases lacrimógenos y balas de gomas a cientos de personas que se manifestanban en el puerto de El Pireo, donde miles de turistas son afectados por la nueva huelga general
Los manifestantes se oponen a un proyecto de ley que pretende aumentar la edad de jubilación, un recorte al pago de pensiones, entre otras medidas para cumplir los lineamientos del Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de un millonario préstamo.
La huelga fue convocada precisamente el mismo día en que el Parlamento tiene previsto iniciar el debate sobre el proyecto de ley presentado por el gobierno del primer ministro, George Papandreu, el cual se prevé que continuará hasta la próxima semana.
Cerca de cinco mil personas, en su mayoría jóvenes, se congregaron desde temprana hora frente y en los alrededores de la sede del Parlamento con pancartas en mano, en las que pedían a los legisladores rechazar el proyecto de ley.
Entre las drásticas medidas gubernamentales, que prevén ahorrar cuatro mil 800 millones de euros, incluye un ajuste para reducir el déficit público del 12.7 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de 2009 al 8.7 por ciento este año.
Además de un aumento de 2.0 por ciento del Impuesto al Valor Agregado (IVA), incrementos en gravámenes al tabaco, bebidas alcohólicas, combustibles y productos de lujo, así como recortes salariales en el sector público.
