Histórico. La obra muestra un avance importante que permite vislumbrar la magnitud del que será un auténtico precedente en la historia del quehacer pastoral de Durango.
Histórico, humano y noble, son algunos de los adjetivos recibidos por el proyecto que en 2008 emprendiera la Arquidiócesis de Durango y que el jueves fue presentado de manera formal ante los medios de comunicación.
POR UNA VEJEZ DIGNA
La Casa Sacerdotal ya es toda una realidad y es sólo cuestión de tiempo para que comience a cumplir con su objetivo: brindar protección a aquellos sacerdotes que han desgastado su vida en el servicio pastoral y que carecen de familiares cercanos que los atiendan en su vejez.
La obra muestra un avance importante que permite vislumbrar (más allá de la maqueta) la magnitud del que será un auténtico precedente en la historia del quehacer pastoral de Durango, tanto por su infraestructura como por su carácter humanitario.
A SUPERAR LA CRISIS
Será a mediados de 2011 cuando el asilo ubicado a un costado del Seminario Mayor de esta ciudad sea inaugurado oficialmente, tras una inversión estimada de 22 millones de pesos, cifra que habrá de variar en proporción al incremento en los costos del material.
Por tal motivo los encargados del proyecto anunciaron los planes de realizar un evento masivo a mediados de abril con la intención de recaudar los fondos necesarios para compensar estos incrementos, sin que se brindaran mayores detalles.
COMPLEJO ÚNICO
Entre las especificaciones destacan sus 18 habitaciones individuales y la creación de diferentes áreas comunes de esparcimiento, así como el servicio de enfermería que será brindado por las religiosas. Todas y cada una de estas características prometen hacer de la Casa Sacerdotal un complejo único en el norte del país.