El agua contaminada o no apta para beber causa cada año más muertes en el mundo que todas las formas de violencia combinadas, incluida la guerra, expresó hoy la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el marco del Día Mundial del Agua.
En su documento 'Aclarando el agua: un enfoque en las soluciones sobre la calidad del agua', la ONU precisó que el 90.0 por ciento de las muertes relacionadas con la contaminación del líquido vital son niños menores de cinco años.
'Estas muertes son una afrenta a nuestra común humanidad, y afectan los esfuerzos de muchos países para alcanzar su desarrollo potencial', afirmó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en un mensaje por escrito.
Ban también destacó que el agua está relacionada con los objetivos de desarrollo globales, influye en la salud materna e infantil, la expectativa de vida, los derechos de la mujer, la seguridad alimentaria, el desarrollo sustentable y el cambio climático.
De acuerdo con la ONU, el agua contaminada, los pobres servicios sanitarios y una deficiente higiene causan aproximadamente 3.1 por ciento de todas muertes en el mundo, alrededor de 1.7 millones de personas anualmente.
El organismo también informó que unos dos millones de toneladas de basura industrial y agrícola se vierten diariamente en los mantos acuíferos en el mundo, según el Programa Mundial de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente (PNUMA, por sus siglas en inglés).
Por su parte, Ali Treki, presidente de la Asamblea General de la ONU, manifestó este lunes, durante una conferencia de prensa que el organismo que encabeza, que espera aprobar una resolución sobre el manejo del agua en los próximos meses.
La ONU destacó también que existen tres vías fundamentales para proteger los recursos hidráulicos del mundo. Uno es prevenir la contaminación de los mantos acuíferos, la segunda es tratar el agua ya sucia, y la tercera es la restauración de los ecosistemas.
Una inversión de 20 millones de dólares en ciertas tecnologías hídricas, por ejemplo, podría sacar de la pobreza extrema a 100 millones de familias rurales, de acuerdo con el informe del PNUMA.