En los meses de enero y febrero de este año, el incremento de impuestos provocó presiones en los precios de productos entre 2 y 2.5% adicionales a los objetivos del Banco de México, concluye el análisis sobre perspectivas económicas 2010, elaborado por el Tecnológico de Monterrey.
"La publicación del Índice Nacional de Precios al Consumidor correspondiente a enero hizo evidente lo que oficialmente se negó durante meses posteriores a la aprobación del paquete fiscal: las medidas adoptadas (alza de impuestos) causaron inflación", dice el informe del Centro de Investigación Económica y Negocios (CIEN) de ese centro de estudios.
Además, por si hubiera alguna duda, con la información de la primera quincena de febrero se confirma que la economía está enfrentando un problema de presión de precios superior al de 2009, implicando que de no contenerse dicha tendencia durante los siguientes meses podría existir la posibilidad de que el Banco de México tenga la necesidad de aplicar una política monetaria más restrictiva, advierte el documento.
José Luis de la Cruz, director del CIEN, aseguró que el aumento de 1.09% reportado para el primer mes de 2010 tiene asociados algunos elementos preocupantes, como el hecho de que la canasta básica sufrió un alza de 1.5% durante el mismo periodo, reflejando con ello, que los bienes consumidos por los sectores pobres de la población son los que más se han encarecido.
Aseguró que si se analiza el impacto por nivel de ingreso, se hace más claro que la gente que percibe hasta un salario mínimo es justamente la más castigada al enfrentar una inflación anual de 4.8%, cifra superior al 4.4 % que fue reportado para quienes ganan más de seis salarios mínimos.
El informe agrega que en 2009, la población que percibió hasta un salario mínimo aumentó en 833 mil personas y la que recibe entre uno y dos salarios en 1.4 millones, por lo que la crisis del empleo ha dejado a más personas que están expuestas a la inflación provocada por el aumento de impuestos y en los precios de los combustibles.