El ministro de Economía de Alemania, Rainer Bruderle, expresó hoy su beneplácito por la decisión de General Motors (GM) y Opel de sanear al consorcio automotriz con recursos propios.
Bruderle comentó que el anuncio de Opel de retirar todas las solicitudes en Europa para obtener financiamiento estatal para su saneamiento, fortalece la decisión del gobierno alemán de negar la ayuda estatal al consorcio automotriz.
'General Motors tiene los medios para sanear Opel. Esta fue la principal razón por la que decidí negar la ayuda estatal a Opel', subrayó Bruderle, tras añadir que 'GM parece preparado para adoptar la responsabilidad como propietario de Opel'.
'Opel tiene un futuro con GM. A General Motors le compete la responsabilidad de las fábricas de Opel y de sus trabajadores', agregó el ministro de Economía.
'La reacción de Opel y GM protege a los contribuyentes y proporciona unas condiciones de competitividad justas en el sector automotriz', resaltó Bruderle.
'Opel podrá centrarse ahora en fabricar con éxito buenos automóviles', agregó.
'Las ayudas estatales deben permanecer como algo excepcional, sino puede darse un efecto de costumbre rápidamente', consideró el ministro de Economía, quien declinó hacer declaraciones sobre las preocupaciones de que GM endurezca su plan de saneamiento para Opel.
El presidente de Opel, Nick Reilly, informó este miércoles que a pesar de la retirada de las solicitudes de ayuda, el fabricante automotriz Opel no prevé más cierres de fábricas ni despidos de los ya planteados.
Las negociaciones sobre posibles ayudas estatales y una posible venta del consorcio automotriz comenzaron en noviembre de 2008. El año pasado GM anunció su negativa de vender su filial y su intención de solicitar avales estatales en Europa.
El plan de saneamiento de OPel establece reducir ocho mil 300 puestos de trabajo de los 48 mil actuales. El consorcio cuenta con fábricas en Russelsheim, Bochum, Eisenach y Kaiserslautern.
La empresa matriz de Opel había solicitado ayuda estatal a Alemania por un monto de mil 100 millones de euros (mil 351 millones de dólares) para poder ayudar a la empresa filial alemana.
