Una manifestación contra la inseguridad pública realizaron comerciantes, taxistas, empresarios, grupos civiles y personas de la tercera edad, lo que obligó al edil de Tepoztlán, Gabino Ríos Cedillo, a despedir al secretario de Seguridad Pública local, Lucino Fuentes Bahena.
Para reprobar la política del alcalde priísta, los taxistas sitiaron el primer cuadro del municipio con sus vehículos bloqueando los principales accesos. El tapón provocó que varios turistas desistieran de entrar a esta localidad, catalogada como pueblo mágico y ni así desistieron de su protesta, ya que, afirmaron, atraviesan una etapa crítica.
Según las estadísticas delictivas, a la fecha ya suman 14 asaltos a taxistas de distintos sitios, así como el asesinato de dos trabajadores del volante: Ignacio García y Fortino Mendoza Ortiz.
A estas muertes se suma el homicidio del joven Eduardo Noriega Romero, asesinado hace unas semanas a unos metros de la comandancia municipal de Tepoztlán, Morelos.
“Extrañamente la policía nunca apareció ni se encontraba siquiera cerca de los lugares de los crímenes. Fue como si los asesinos tuvieran carta abierta y conocieran todos los detalles para operar impunemente”, dijo la regidora de Bienestar Social, Lucila García Sánchez, quien desde el inicio de esta gestión (2009-2012) ha exigido la depuración de la Policía Municipal.
Desde el inició de la actual gestión, en noviembre de 2009, la regidora cuestionó el nombramiento del comandante Fuentes Bahena, porque él y varios de sus colaboradores cercanos fueron cesados en el municipio de Jiutepec en septiembre de ese año, por presunta extorsión a delincuentes.
Su salida, explicó la regidora, ocurrió tras la ejecución del director de la Policía Preventiva Municipal de Jiutepec y su escolta, a manos de sicarios del cártel de los Beltrán Leyva.
Paradójicamente, su dimisión como mando superior en Jiutepec ocurrió tras una manifestación que protagonizaron más de 100 agentes locales, quienes lo responsabilizaron por la deficiente estructura policial para prevenir los delitos en esa demarcación situada al oriente del estado.
Los taxistas y diferentes grupos civiles organizados marcharon y gritaron consignas frente al palacio municipal y tras ello obligaron a salir al edil Ríos Cedillo para anunciar el despido del comandante Fuentes Bahena.
Ríos Cedillo regresó al interior del palacio municipal para redactar el acta compromiso, pero antes pidió a los manifestantes proponer alternativas para garantizar la seguridad del municipio. Su petición fue respondida por los campesinos que se encontraban en la parte posterior del grupo manifestante: “Que vengan los soldados o la Policía Federal a vigilar”.
