Entre barrancas y serranías de Uruachi, Chihuahua, agentes de la Procuraduría General de la República (PGR) a bordo de un helicóptero siguieron una avioneta Cessna de cuatro plazas, tripulada por un grupo de narcotraficantes.
Los tres oficiales federales obligaron a que aterrizara el avión y cuando se disponían a descender fueron atacados. El piloto recibió dos impactos de bala, pero continuó las maniobras para repeler la agresión y llegar a tierra.
Los narcotraficantes que viajaban en la avioneta abrieron fuego a la distancia para ir hacia la sierra, abandonando la aeronave con 200 kilos de marihuana.
Horas después del incidente arribaron al apartado paraje un grupo de militares para rescatar a los oficiales. El piloto fue trasladado a Hermosillo para recibir atención médica.
Uruachi se ubica en los límites con Sonora, su terreno es escarpado y no cuenta con vías de comunicación terrestres, lo que lo ha convertido en un enclave para el cultivo de marihuana y amapola, así como la producción de otros enervantes. La zona es altamente violenta por la presencia de grupos criminales.
Este viernes, en Chihuahua ocurrieron 12 ejecuciones; siete en Ciudad Juárez, dos en la capital, una en Cuauhtémoc y dos en Jiménez. En Baja California ocho hombres fueron asesinados, ocho en Sinaloa y un menor en Durango.
