Adiós. Kendra saltó a la fama gracias al reality The Girls of the Playboy Mansion. En octubre de 2008 se separó de Hugh Hefner. ARCHIVO
MÉXICO, DF. Pese a que sus pechos son la carta de presentación de Kendra Wilkinson, la popular conejita recordada por su estruendosa y contagiante risa, confesó su deseo por reducirse los senos.
Su cita en el quirófano, reconoció, sería al finalizar el periodo de lactancia de su hijo Hank Baskett IV, pero que hasta ahora lo está pensando debidamente, ya que el consorcio de Playboy quiere que la modelo pose de nuevo para su portada.
"Están un poco grandes ahora. Estoy considerando hacerme una reducción de pechos", fue el comentario de la modelo durante su reality show, el cual goza de una buena aceptación en la televisión estadounidense.
Kendra, quien vivió un tórrido romance con Hugh Hefner, dueño del concepto Playboy, admitió no sabría responder si le pidieran volver a posar.
"Si me lo preguntaran sería una decisión difícil, pero creo que me inclinaría por el no. El capítulo Playboy de mi vida está cerrado".
Es probable que luego de esta declaración la ex inquilina de la mansión de Hefner no vuelva a estar entre las eróticas portadas de la popular revista.