El primer hotel nudista en Turquía, inaugurado hace apenas seis días, se vio obligado a cerrar sus puertas, pero no por cuestiones morales sino porque uno de sus balcones no se ajustaba a los planos arquitectónicos.
El cierre del hotel Adaburnu-Golmar ubicado en Datca, en la costa del Mar Egeo, fue decidido tras una inspección de las autoridades locales, que ordenaron el cierre temporal para la restauración pertinente, de acuerdo con reportes de la cadena de noticias BBC de Londres.
La medida afectó a 12 huéspedes del hotel, de 64 habitaciones, quienes debieron ser trasladados semivestidos a otros alojamientos convencionales de la zona, mientras que el dueño del hotel, el empresario Ahmed Kosar, confió en reabrir el próximo miércoles.
Kosar, veterano en la industria turística de Turquía afirmó que siempre busca nuevos nichos para explotar y que un número de clientes europeos en sus otros hoteles había expresado su interés en el nudismo, así que decidió buscar un lugar adecuado en ese país.
El complejo fue construido en un lugar tranquilo en la península de Datca, al este de la popular ciudad turística de Marmaris, para ofrecer a sus huéspedes la oportunidad de estar desnudos alrededor de la piscina o en una playa privada.
El hotel sólo está abierto a los turistas extranjeros y a los trucos no se les permite hospedarse, sólo entran los empleados -casi todos hombres- pero siempre con uniforme.
Según el propietario no se han reportado objeciones de los residentes locales porque la desnudez de los turistas se limita a los terrenos del hotel, pero admitió que a muchos otros alojamientos se les permite seguir operando a pesar de no conseguir las licencias necesarias.
Kosar rehusó comentar sobre la posibilidad de que funcionarios del gobernante Partido AK -conservador- estuviesen detrás de la clausura, pero dijo que si su proyecto siguiera bloqueado considerará trasladarlo a otro país como Croacia o el norte de Chipre.
