Cierre mediocre

Ciudad Juárez, Chih. - La Selección Mexicana de futbol empató anoche a dos goles con su similar de Venezuela en partido amistoso jugado en el Estadio Olímpico.

Los goles fueron obra de Javier Hernández al 34 y Giovanni Dos Santos al 61 por parte de los mexicanos. Por Venezuela marcó Juan Arango los dos goles al 6 y al 40, ambos de tiro libre.

El mágico zurdazo de Giovani Dos Santos (60) rescató al Tricolor de la hecatombe, aunque no lo libró de unos cuantos abucheos. No hubo fiesta en el lienzo verde, sólo otra gris actuación de un equipo frágil de sentimientos, al que le cuesta enfriar el corazón y calentar las piernas, lo que lo mete en demasiados problemas, más de los que ya tiene fuera de la cancha.

Anoche se los generó la selección de Venezuela, que disputó 65 minutos con un hombre menos y que jamás le había arrancado ni un empate a México. Ocho victorias en igual número de confrontaciones.

Eso explicó el desencanto de los futbolistas mexicanos tras el silbatazo final de Joel Aguilar. Muchos resoplaron, quizá sorprendidos por el nivel de la "Vinotinto" o por estar conscientes de que no serán requeridos para jugar en el equipo nacional durante varios meses. La invasión colectiva de los últimos minutos aumentó la sensación de alivio. Por fin, el trago amargo terminó... Al menos por ahora.

Tercera presentación del Tricolor en Juárez y tercer empate. La frontera le incomoda, tanto como el entorno que vive actualmente, ese que provoca excesos en varios de los hombres que están en medio de la polémica.

Rafael Márquez y Guillermo Ochoa fueron los que la pasaron peor. El capitán sufrió en la contención, sobre todo cuando Efraín Flores decidió prescindir de Antonio Ríos y dejarlo como único escudo. Tuvo que multiplicarse, y lo hizo en muchas ocasiones, pero en otras llegó tarde y cometió faltas innecesarias.

Una de éstas provocó el tiro libre que concluyó con la segunda anotación venezolana. Juan Arango presumió esa maravillosa zurda un par de veces. Ochoa pudo hacer algo más. Falló. Primera ocasión en la historia que los sudamericanos le hacen dos tantos al Tricolor.

La gente se lo recriminó y el estratega interino, quien concluyó su turbulenta etapa, optó por José de Jesús Corona para el complemento. No hubo mucha oportunidad para medirlo, Venezuela casi no atacó durante la segunda mitad.

Flores lo presentía y mandó a todo su arsenal: Giovani, Javier Hernández, Enrique Esqueda, Elías Hernández y Pablo Barrera. Arrinconaron al rival, pero sólo lograron marcar el del empate gracias a la lucidez de Dos Santos, uno de los más activos en la noche.

El otro fue el "Chicharito", quien cumplió como goleador (34), pese a que falló dos opciones importantes.

Le resulta imposible escapar a ese cúmulo de sentimientos encontrados que tienen atrapada a la Selección. Ni siquiera el entrenador puede hacerlo. La prueba fue cuando casi se lía a golpes con César Farías, director técnico de la selección venezolana.

Nada que festejar para un grupo que continúa dando más de qué hablar fuera del terreno de juego que dentro, al que los problemas personales pueden hacerlo histórico, mas no su pobre futbol.