El índice de criminalidad, que ha sido utilizado por las partes en conflicto por la ley antiinmigrante SB 1070 en Arizona, ha disminuido en este estado desde la década de los años 90, Según los resultados de estadísticas recientes.
'Por muchas razones, Arizona ha venido a ser un estado más seguro desde que los inmigrantes empezaron a poblar a Arizona en la década de los 90', aseguró un despacho publicado por Los Angeles Times.
'Ambas partes del debate sobre inmigración en Arizona han usado el argumento del crimen pero estadísticas muestran que los residentes nacidos en el extranjero cometen allá menos delitos', resaltó el diario.
A pesar de ese reporte contundente y de forma paradójica los impulsores de la medida que ha desatado criticas y condenas a nivel nacional e internacional, han sustentado que esa ley tiene su motivación principal en la seguridad publica.
Se precisO que el crimen ha disminuido en el país desde la década de los 90 y el decremento se ha dado de una manera mucho más solida en Arizona en donde la tasa de crímenes a propiedad, por ejemplo, disminuyó 43 por ciento desde 1995 comparado con el 30 por ciento a nivel nacional.
'Así que no debe haber mayor sorpresa para las dos partes en conflicto el que se enteren que los inmigrantes tienden a cometer menos delitos que los originarios de esta nación', subrayó la información.
Los defensores de la ley SB 1070 de manera frecuente citan el caso de dos oficiales de policía asesinados por indocumentados en 2007 o el reciente asesinato de un ranchero cerca de la frontera de México por un traficante de drogas.
El argumento se fortaleció luego de conocerse que un alguacil fue lesionado con arma de fuego en un enfrentamiento con un individuo sospechoso de traficar droga desde México, anotó.
Jack Harris, jefe de la policía de Phoenix indicó que diez por ciento de los arrestos que realiza su departamento son de indocumentados, un número cercano al porcentaje estimado de inmigrantes indocumentados en esa población local.
La oficina del Sheriff de Maricopa ha señalado que 20 por ciento de su población son indocumentados y 15 por ciento de los presos en ese estado son inmigrantes sin documentos migratorios validos.
