Inversiones. Además del cambio de nombre, la empresa anunció una importante inversión de 250 millones de pesos, esto se da después de sus problemas de liquidez en 2008. ARCHIVO
El fabricante de papel Corporativo Durango, que a partir de mañana cambia su nombre a Bio-PAPPEL, adelantó que en los próximos cinco años invertirá 250 millones de dólares en la construcción de cinco mega plantas de producción, así como en un número igual de unidades de cogeneración de energía.
El director y presidente del Consejo de Administración de la empresa, Miguel Rincón, destacó que la inversión permitirá aumentar su capacidad de producción en 8.0 por ciento cada año.
De igual forma, precisó que esta nueva infraestructura implicará la generación cada año de 300 plazas laborales, las cuales serán 'muy bien pagadas y de alta calidad', por lo que equivalen a tres o cuatro empleos normales.
Sobre el cambio de identidad corporativa de la compañía, el directivo explicó que la nueva imagen está acorde con su modelo de negocios de sustentabilidad. 'Ésta es una decisión estratégica para posicionar a la compañía más sólidamente en el campo de la sustentabilidad, para diferenciar a la empresa en términos de su compromiso en esta materia y también para posicionar una marca en el largo plazo', enfatizó.
Con estos cambios, abundó, las acciones del corporativo cotizarán en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) con la clave de pizarra PAPPEL, en tanto que sus subsidiarias estarán conformadas por Bio-PAPPEL Packaging (Empresas TITAN), Bio-PAPPEL Printing (Grupo PIPSA-MEX), Bio-PAPPEL Kraft (Papeles Mexicanos) y Bio-PAPPEL International (Mckinley Paper Company).
Miguel Rincón subrayó que como parte de esta transformación la empresa invirtió más de cuatro millones de pesos en aspectos como sustentabilidad, lo que permitió reducir hasta un 22 por ciento las emisiones de carbono.