La Unión Ciclista Internacional (UCI) y el Consejo Superior de Deporte Español (CSDE), enfrentan serias diferencias con respecto al presunto caso de dopaje del ciclista español Alberto Contador, en el pasado Tour de Francia.
Esto surgió luego de que el presidente de la UCI, el irlandés Patrick 'Pat' McQuaid comentó durante la presentación de la versión 2011 de esta carrera en París que "en España hay un problema serio de dopaje y no es la primera vez que lo digo".
A pesar de que no estuvo presente, el campeón Alberto Contador fue un tema importante en el evento, ya que la declaración de McQuaid provocó una reacción inmediata del CSDE, quien respondió "el problema no lo tiene España, lo tiene la UCI con el ciclismo".
Anteriormente Pat McQuaid declaró que autoridades españoles habían reconocido el problema de dopaje en su país y ofrecieron encontrar la manera de que este problema se terminara.
"Las autoridades españolas me telefonearon a Melbourne y aceptaron que existe un problema de dopaje ahí, por lo cual prometieron colaborar para mejorar las cosas. No es la primera vez que lo he comentado, porque lo creo", declaró el dirigente de la UCI.
En el caso de Contador, McQuaid dijo: "La UCI no protege a nadie. Desde el principio nos hemos regido por las normas y trabajamos con la AMA, con la que mantenemos contacto a diario. La lucha contra el dopaje es un aspecto muy importante para nosotros".
Debido a estas declaraciones, el CSDE envió un comunicado de prensa en el que aclaró que "el principal problema en materia de dopaje no lo tiene España, sino algunas modalidades deportivas que exigen un esfuerzo agónico".
"Por ello el presidente de la UCI haría bien en dedicar toda su energía en trabajar para mejorar la situación en su deporte en lugar de diluir su responsabilidad acusando a un país como España, donde su irrenunciable política de tolerancia cero nos sitúa en la vanguardia de la lucha contra el dopaje" agregó.
