El Instituto Federal Electoral advirtió -pese a tener un presupuesto que durante la última década casi alcanzó los 80 mil millones de pesos- que es el único organismo nacional que contuvo su expansión presupuestal al crecer su gasto a una tasa promedio 2% anual.
Defendió el salario de los consejeros electorales los cuales, dijo, "se trata de remuneraciones altas, pero a lo largo del debate se ha omitido decir que esos salarios no son determinados por el IFE, sino que están definidos desde la Constitución de la República".
Destaca que el artículo 41 constitucional prevé que los consejeros perciban los mismos ingresos que los ministros de la SCJN, que hay una previsión en la Carta Magna para que ningún funcionario pueda ganar más que el Presidente de la República.
Dice que mientras mantiene una contención presupuestal, el presupuesto del Poder Judicial creció 17%, el del Ejecutivo 10.6%, el del Senado 10.2%, el Presupuesto de Egresos de la Federación 10.2% y el de Cámara de Diputados 9.1%.
El organismo elaboró un estudio, para responder al análisis realizado por el investigador Marco Mena, del Centro de Estudios de Investigación y Docencia Económica, denominado "El IFE y el costo de la vida democrática en México: respuesta al estudio ¿Cuestan demasiado las elecciones en México?", y justificó:
"A partir de 2000 y en la siguiente década, el IFE es la institución pública que más ha contenido su expansión presupuestal, a una tasa de 2% a lo largo de 10 años, y a pesar de cambios importantes en sus funciones y estructura.
El documento, elaborado por la Secretaría Ejecutiva hace notar que para 2010, con fecha de noviembre pasado, el gasto del IFE asciende a 8 mil 631 millones de pesos y que para 2011 costará 10 mil 499 millones de pesos corrientes.
Subraya que "en general" las necesidades presupuestales del Instituto pueden clasificarse en 3 grupos: los años anteriores a las elecciones federales, los años de la elección y los que sobrevienen al proceso electoral federal.
