Luego de siete meses y ocho días, Diego Fernández de Cevallos, volvió a tierras queretanas para reunirse con sus hermanos, sus hijos y un grupo selecto de amigos, en casa de uno de estos últimos con quienes se tomó un tequila para celebrar su liberación.
Durante varias horas, Fernández de Cevallos convivió con sus seres queridos a quienes confesó que durante el tiempo que estuvo privado de su libertad, perdió seis kilos, pero que su ánimo nunca se perdió.
"Está demacrado, como es lógico, pero con mucho ánimo; llegó ayer a Querétaro, se reunió con amigos, con sus hijos y sus hermanos, y le dio un mensaje a su familia de que tienen que estar unidos", dijeron fuentes cercanas a la familia.
De acuerdo con estas mismas fuentes, Diego está decidido a seguir adelante, a no amilanarse.
"Gracias a Dios estoy con otra vez con todos ustedes; vamos para adelante, como lo dije, siempre con mi familia", dijo Fernández de Cevallos a sus seres queridos.
Del ex candidato presidencial se quedará en tierras queretanas, cuando menos hasta el próximo 26 de diciembre, para pasar con sus seres queridos la Navidad, aunque no se quedará en la finca La Cabaña.
"Ese sería el último lugar en el que se quedaría; tiene cuando menos otras tres opciones para pasar estas fechas, aunque también sus amigos le ofrecieron sus casas para festejar la Navidad", afirmó una de las fuentes.
OFENDEN A FAMILIA ESPECULACIONES Asimismo, las fuentes señalaron que si bien, Diego Fernández no habla de las circunstancias de su secuestro, ni de su liberación, a sus familiares, principalmente a sus hijos, les duelen los comentarios que se han vertido, en torno a que su reaparición fue un montaje mediático.
"Están muy dolidos; para ellos fue muy doloroso todo este proceso; y que haya quienes digan que todo fue un montaje les duele mucho, les duelen los comentarios", afirmó una de las fuentes. A sus familiares y amigos les insistió en que está fuerte y listo para seguir con su vida, tal como si nada hubiera pasado.
Se publicó ayer que la Procuraduría General de la República dejó en manos de Héctor Rodríguez Franco, un cercano colaborador de Francisco Molina Ruiz, Subprocurador de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo, la investigación del secuestro de Diego Fernández de Cevallos.
LE PREOCUPA LA SALUD DE SU HERMANO Además, las fuentes revelaron que Alfonso Fernández de Cevallos, quien la noche del pasado miércoles sufrió un infarto, fue trasladado a la Ciudad de México a un hospital privado para seguir con su atención médica.
Esta situación tiene preocupado al ex Senador de la República, quien mantiene contacto vía telefónica con sus sobrinos, para conocer del estado de salud de su hermano.
Alfonso Fernández de Cevallos, estuvo internado apenas unas horas en el hospital Médica 100 de la capital del Estado en terapia intermedia y de ahí, fue trasladado, vía terrestre, ayer a la capital del país.
