Quince días después de que 16 jóvenes deportistas inocentes murieron por las balas del crimen, el director técnico de la Selección Mexicana de Futbol declaró que el narcotráfico "ha permeado la sociedad... y hoy no puede uno andar en la calle tranquilamente porque de repente hay líos y te pillan en medio".
Veintiún días después de que "El JJ" disparó contra Cabañas y huyó protegido por todo el Bar-Bar, Javier Aguirre comentó que "siempre hay estos desquiciados, estos desadaptados. Yo desde luego tomo mis precauciones".
Once días después de que el desbordamiento de un río mató a una treintena de personas en Michoacán, El Vasco dijo que en nuestro país "llueve mucho, mucha gente lo ha pasado mal... hay ciudades anegadas".
Diez meses después de tener que rescatar a un equipo que estaba en la raya de perder su clasificación a Sudáfrica, el entrenador recordó que "hay voces ahí que salen de tono y (hablan de ser) campeones y bueno, joder, México es lo que es", un seleccionado que ha estado entre el lugar 10 y 15 en los últimos cuatro Mundiales.
A 46 días de que finalizó el año en que nuestro país sufrió la peor crisis económica de la historia, la pandemia de la influenza A H1N1 y los 17 mil ejecutados de la guerra contra el narcotráfico a Aguirre le preguntaron "¿Cómo está México?", y él respondió "jodido, jodido". Luego muchas voces lo lincharon y recibió tales presiones que fue obligado a ofrecer disculpas la noche del domingo.
El hombre que recibió del presidente de la República la petición de tomar una selección en proceso de hundimiento, que la puso a flote por segunda vez en su carrera, a quien las encuestas lo ubican como el mexicano más popular y que en su trayectoria ha demostrado tener una cultura que rebasa las canchas, tiene toda la autoridad moral para hacer el diagnóstico de país que considere.
Si alguien no está de acuerdo con tal diagnóstico, que argumente en contra, pero que no obligue a la disculpa, mucho menos colgándose de la demagogia de que "hay que hablar bien de México en el extranjero", como si no existiera la era digital que ha roto las barreras geográficas y de tiempo en la divulgación de la información. ¿No era el foro? Fue en el programa deportivo de mayor prestigio en la cadena radial más escuchada del país con el futbol más seguido del mundo. ¿El acento? Uno regresa hablando como yucateco o sinaloense con un fin de semana de vacaciones.
Este reportero no sabe si Aguirre imaginó que nadie se enteraría de sus palabras, si se expresó animado por un tinto español y/o si simplemente se sintió cómodo en la entrevista, pero eso sí, no dijo una sola mentira y su ejercicio crítico no exhibe ninguna falta de compromiso con su país ni con su selección.
El Vasco fue contratado para motivar a algunos jugadores y hacerlos ganar partidos, no para echar porras a algún partido y hacerlos ganar elecciones. No está obligado a promover el turismo del país como si se tratara del desdibujado secretario del ramo ni a fomentar la inversión extranjera pues para eso está una secretaría que ocupa un cuate del presidente.
Por tanto, no tiene de qué disculparse, hayan llegado las presiones de donde hayan llegado. Y en consecuencia, este reportero no acepta las disculpas de Javier Aguirre.
