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CRÓNICAS DE REPORTERO

Del cinismo mágico

CARLOS LORET DE MOLA

El Recuerdo De Juanito Aquel pobre hombre tan tristemente utilizado por Andrés Manuel López Obrador y por el mismo Marcelo Ebrard cuando el PT lo postuló como candidato a Delegado Político en Iztapalapa, nuevamente aparece. Fue aquel Juanito a quien el tabasqueño le hizo firmar públicamente una carta-compromiso, en donde se obligaba una vez Delegado, a hacer todo lo que en su momento le ordenara AMLO. Así, esta estrafalaria figura democrática concebida por la mente imaginativa y calenturienta del tabasqueño, es lanzada ahora corregida y aumentada para el Estado de México.

 COMO PRODUCTO Natural de las acciones destructivas y la división que ha venido implementando AMLO al interior del PRD, del PT y Convergencia, el que fuera Jefe de Gobierno del Distrito Federal ha anunciado orbi et urbi la siguiente ocurrencia: "Que "SU" candidato al Gobierno del Estado de México se comprometerá (ante él) a entregar pensiones alimenticias para los ancianos, medicamentos gratuitos, becas a estudiantes, madres solteras y discapacitados y otras muchas medidas similares a las que él implantó en el Distrito Federal".

 CON RELACIÓN A tan espectacular pronunciamiento habría que preguntarnos, para así poder entender el pirotécnico planteamiento del tabasqueño, Primero: ¿Qué los candidatos no son el producto del consenso de una asamblea de militantes del propio partido? ¿Qué no es verdad que en un sistema de partidos que tenemos, los candidatos surgen de la voluntad mayoritaria de los militantes de esos partidos y no del capricho de un notable? Para el tabasqueño eso no es así.

 EN UNO DE SUS MÁS Inspirados momentos de soberbia, Andrés Manuel comunicó al pueblo del Estado de México que él será quien imponga SU candidato aunque no especificó por cual partido o coalición; pero además, que ese candidato impuesto por él, deberá firmarle previamente una carta-compromiso en donde se obligue a gobernar como él lo disponga y además, que aquél deberá rendirle cuentas de su desempeño. En sus largas noches de vigilia tropical, Andrés Manuel soñó convertirse en el gran dedo elector como el que había en el pasado. Hoy esa figura ha muerto y está enterrada. Además, para que AMLO llegue ser como aquel gran dedo que todos conocimos, le falta muchísimo. Su dedo no tiene poder para imponer gobernadores o delegados peleles. Su dedo apenas le ha permitido destruir a la izquierda mexicana y desbaratar el partido que fundó Cuauhtémoc Cárdenas junto al proyecto histórico de fundar una izquierda moderna y democrática.

 EL PROBLEMA DE AMLO , es no haber sabido canalizar su innegable fuerza política, y fortalecer una izquierda nueva y unida. Para él, esto ha sido imposible por su propia naturaleza y su espíritu de lobo solitario, que le impide aceptar consensos democráticos, pues siempre ha tratado de imponer unilateralmente su voluntad bajo dos principios: "Al diablo con las instituciones y después de mí, el diluvio".

 ESTAMOS ENTRANDO CON AMLO A una nueva etapa del cinismo mágico, una dimensión desconocida hasta ahora en la política mexicana. ¡En verdad que sí es un peligro!

Hace rato que cuidar las formas dejó de estar de moda en la política mexicana, pero olvidarlas puede traer costos a un joven panista con altas aspiraciones, un priista que construye su escalera al 2018 y una perredista que quiere, desde un discurso de pureza, gobernar el Estado de México. Las relaciones familiares "peligrosas" son su denominador común.

Roberto Gil Zuarth es el favorito para convertirse en dirigente nacional del PAN. Mientras él se registraba para competir por el cargo, su esposa, Carla Astrid Humphrey, iba a ser electa presidenta del Instituto Electoral del Distrito Federal. Hasta donde se ve, no hay impedimento legal, pero claramente sí un conflicto de intereses. Al grado que el día de la elección vecinal en el DF que le tocaba supervisar, Humphrey acudió a aplaudir a su esposo a la sede nacional panista. Ahora hay un proceso abierto para destituirla por eso. Los "gilistas" en el PAN han filtrado que si su "gallo" gana, la cónyuge renunciaría a ser árbitro electoral. ¿Y si no gana? ¿Es sano, es ético, se "ve bien", que una consejera electoral esté casada con un relevantísimo diputado federal del PAN?

Humberto Moreira, priista gobernador de Coahuila, no esconde su intención de que lo suceda en el cargo su hermano Rubén, diputado federal, quien ya empieza a despachar no sólo como candidato sino como gobernador electo, pues el actual mandatario ha emprendido la ruta para conquistar la dirigencia nacional del PRI. Como no sería pulcro que le entregara el mando del estado personalmente a su hermano, el plan luce trazado: él se separa de la gubernatura para buscar oficialmente la dirigencia nacional del tricolor, surge un gobernador interino mientras el otro Moreira compite en la elección, y en caso de que la gane, le entrega la estafeta. Con un poder familiar transexenal en Coahuila y el hermano menor en la dirección priista, el 2018 estará en su mira. ¿Alguien creerá que la elección coahuilense será limpia?

Autonombrada defensora de las mejores causas de la izquierda, proveniente de la Canacintra, la senadora perredista Yeidckol Polevnsky, vota en contra del impuesto al tabaco y por tanto, sistemáticamente a favor de las empresas tabacaleras. El detalle es que su hija, Shirley Almaguer Camacho, es ejecutiva de la empresa tabacalera British American Tobacco México. En el mejor de los ánimos, no se trata de que una de las dos tenga que dejar su carrera, pero existe la abstención particular para evitar cualquier impresión de conflicto de interés a la hora de sufragar. Y no haber acudido a ella despierta la sospecha en la senadora lopezobradorista.

Para que el diputado panista Roberto Gil tenga una esposa consejera electoral, para que el gobernador priista Humberto Moreira entregue el poder a su hermano, para que la senadora perredista Yeidkol Polevnsky vote alineada con los intereses de su hija, no hay ningún impedimento legal, pero no le da prestigio a la política, no se ve bien, no se antoja ético ni responde a las deseadas mejores prácticas democráticas. ¿Quién va a tirar la primera piedra si todos lo hacen?

 SACIAMORBOS

Y eso que no se le ha puesto cocoa a este batido.

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