Reunión. El presidente Felipe Calderón reconoció los esfuerzos dirigidos a mejorar la seguridad fronteriza bajo una perspectiva de responsabilidad compartida, durante una reunión con congresistas de Estados Unidos encabezados por el legislador demócrata Eliot Engel. NOTIMEX
El presidente de México, Felipe Calderón, reiteró al Gobierno de Estados Unidos la urgencia de cerrar la extensa frontera común al contrabando de armas, que por miles llegan a manos de los narcotraficantes en el país.
Calderón denunció en una entrevista con la cadena bogotana Caracol Radio que la violencia en México "se incrementó enormemente" desde 2004, cuando las autoridades estadounidenses levantaron la prohibición a la venta de armas de asalto.
"En estos tres años y medio (los que lleva en el poder) hemos decomisado 85 mil armas, incluyendo casi 50 mil rifles de asalto Ak-47 y R-15, es decir, capacidad de fuego para armar uno o varios ejércitos", subrayó Calderón, que llegó Bogotá para asistir a la investidura del presidente electo de Colombia, Juan Manuel Santos.
Calderón agregó que, durante su mandato también se han decomisado "unas 6 mil granadas, 10 millones de cartuchos e, incluso, decenas de rifles o de fusiles Barret 50, que son capaces de penetrar cualquier blindaje y tienen un poder de fuego enorme".
Son armas introducidas desde Estados Unidos, por la frontera de cerca de 3 mil kilómetros con México, señaló el presidente, para quien este arsenal de guerra "se vende libremente" en la línea limítrofe fronteriza.
"Si quieren sellar la frontera, séllenla para las armas, porque está prohibido que las exporten a países donde su uso está prohibido" , sugirió Calderón, aunque observó que, entre vecinos, "lo que debe funcionar es la construcción de puentes y entendimientos" .
Las murallas o barreras simplemente distancian a los pueblos, apuntó y señaló que "no están resolviendo el problema de fondo y sí están generando una enorme situación de presión que a nada va a conducir" .
La migración, dijo, "obedece a fenómenos económicos y sociales que no se pueden parar por decreto" .
"Lo que tenemos que hacer es buscar mecanismos para regular ese flujo en beneficio de ambos países, protegiendo los intereses de los pueblos" , consideró el presidente mexicano.
