Costumbre. En la familia Corral las piñatas representan más que un modo de trabajo, pues lo consideran otro tipo de 'arte'.
Figuras de personajes fantásticos, animales, caricaturas y hasta políticos cobran forma en las manos de la familia Corral, quienes desde hace más de una década se dedican a elaborar piñatas en la Comarca Lagunera. "La verdad uno sueña con esos personajes cuando es niño, cuando uno hace esto como que se regresa en el tiempo", dice el señor Corral, quien inició junto con su abuela el negocio en la ciudad de Durango.
Desde jugadores del Santos hasta la virgen de Guadalupe en su versión caricaturizada forman parte de la oferta en piñatas que a diario se ofrecen sobre el Diagonal Reforma de Torreón, "para que pague las que debe", asegura entre risas el señor Corral quien reconoce que la piñata "religiosa" es la más extraña que le han solicitado, "me han pedido de López Obrador, de teiboleras, pero la de la virgen es la más rara de todas".
La familia Corral, compuesta por 5 hijos que ayudan a diario en el proceso de elaboración de piñatas, además de auxiliar en el negocio de su padre, cuentan con sucursales propias, sin embargo más allá de ser un negocio, el señor Corral lo considera otro tipo de arte, "yo me considero un artesano, desgraciadamente no valora nuestro trabajo y piensa que es fácil".
SEÑOR CORRAL
Fabricante de piñatas