Progreso. Para Rosa Isela Gómez el conducir una unidad de Taxi-Mujer es una forma de salir adelante económicamente. JOSÉ ANTONIO RODRÍGUEZ / EL SIGLO DE DURANGO
"Ya nadie contrata a la gente que ya tiene sus años y eso no nos permite sacar a nuestra familia adelante", fueron los comentarios de Rosa Isela Gómez Rivas, quien ahora es una de las 32 conductoras de los nuevos taxis rosas, que podrán ser usados exclusivamente por féminas, con sus hijos hasta los 12 años de edad.
Al no contar con apoyo del padre de sus tres niños, ha tenido que buscar alternativas que le permitan llevar el sustente al hogar.
"Estoy en la situación como muchas, divorciada y con la total responsabilidad de mis tres hijos, dos adolescentes y mi pequeña de cuatro años, que anda conmigo para todos lados".
NUEVOS PLANES
Rosa Isela se enteró a través de los medios de comunicación sobre la oportunidad de trabajo en el servicio de transporte y al no encontrar otra opción se acercó a pedir informes y posteriormente a inscribirse; donde fue una de las seleccionadas para entrar en el proyecto.
Luego de intensas capacitaciones sobre manejo, defensa personal, mecánica, educación vial, primeros auxilios, turismo, entre otros, recibió la noticia que iniciaría como conductora de algún Taxi-Mujer, lo que le generó mucha emoción.
"Hoy espero que me vaya bien, tengo una obligación con mis hijos, pero ellos me apoyan y aunque los más grandes ya no podrán subirse a la unidad por la edad, si están muy entusiasmados por mí".
Agregó que ahora tendrá que establecer sus horarios dentro del hogar y llevar a la niña a la guardería, mientras permanece en el trabajo, pues pretende dedicarle muchas horas, para obtener un buen ingreso, "lo haré hasta los domingos, pues lo que se gane ese día, es todo para la conductora".