El elefante mira al hombre sin ropas y le dice: "Me parece ridículamente pequeña; no está donde debería estar; y además no creo que puedas recoger cacahuates con ella"... El novio, preocupado, le pregunta a su dulcinea: "Si nos casamos, Rosilí, ¿crees que podrás vivir con lo que gano?". "Desde luego que sí, mi amor -contesta ella-. Pero ¿de qué vas a vivir tú?"... Don Ultimio llegó muy preocupado de su visita al médico. Le cuenta a su señora: "El doctor me dijo que debo tomar una de estas píldoras cada día, por lo que me resta de vida". Replica la señora: "¿Y qué problema es eso?". Responde con acento sombrío don Ultimio: "Nada más me dio siete píldoras"...
Un señor visitaba la fábrica de condones. Observó no sin asombro que una obrera le hacía un agujerito en la punta a uno de cada 10 preservativos. "¿Por qué hace eso?" -le preguntó, intrigado, al supervisor. Explica el hombre: "Es que también fabricamos chupones para bebé, y no podemos desamparar por completo esa línea"... Al cumplir sus 21 años el PRD vive su peor momento. Lo muestra la indecible alianza que trabó con el PAN, que vive su momento peor. Dividido por pugnas de poder, y fragmentado en tribus, el PRD es hoy por hoy un conjunto de dogmas y dogmáticos que de pronto le apuestan al caudillismo autoritario y luego recurren a la violencia y el desorden como medidas de presión. La izquierda mexicana es poco diestra cuando se trata de entender los cambios en el mundo, que implican el ejercicio democrático en vez de las imposiciones, la ética política por encima del pragmatismo corruptor, y el diálogo como renuncia al insulto y la agresión. Muy alejado está ese partido de la idea seminal que originó su fundación, fincada en una izquierda que buscara la implantación de la justicia sin menoscabo de la democracia y de la libertad. He dicho muchas veces, y lo repito ahora, que México está urgido de un gobierno de izquierda, pero de una izquierda moderna, liberal, honesta, abierta a la discusión de las ideas y libre de prejuicios anacrónicos. (Y si habla inglés, mejor). Agobiado por el personalismo, sumido en una profunda crisis económica y política, liquidado casi su capital electoral, el PRD llega a este aniversario en condiciones tales que no dejan mucho espacio a la esperanza. Así, refundido, también el PRD necesita una refundación. (¡Bófonos!)... Capronio, ruin sujeto, había vivido durante mucho tiempo en libre unión con su pareja. Un día ella le sugirió tímidamente: "Hemos estado juntos ya 30 años, Capronio, y tenemos cinco hijos. ¿Por qué no nos casamos?". "¡Estás loca! -responde el cínico sujeto-. A estas alturas de la vida ¿quién va a querer casarse con nosotros?"...
El conductor de la carroza fúnebre se dirigía en su vehículo al panteón. Le dice una voz: "Vas demasiado rápido, Caronte, y te has pasado ya dos semáforos en ámbar". "¡Carajo, Chincheta! -protesta él-. ¿Ni muerta me vas a dejar manejar en paz?"... El famoso pintor toma su pincel y su paleta y le pide a la modelo: "Y ahora ¿qué tal una ligera sonrisita, doña Gioconda?"... En la cárcel un preso le comenta a otro: "Siempre juré que la policía jamás me agarraría vivo. Pero cuando llegó el momento me dije: 'Bueno, qué chingaos'"... Nervioso, el nuevo curita le pidió al Padre Arsilio que observara la forma en que confesaba, y le diera luego su opinión. Oculto en el confesionario el buen sacerdote oyó las confesiones del novato, y luego le externó su parecer. "Hijo -le aconsejó-. Te recomiendo que al confesar te pongas una mano en la barbilla y digas con tono meditativo: "Mm... Mm...", en vez de darte una gran palmada en la rodilla y exclamar: "¡No manches, güey! ¿Y luego qué pasó?"... FIN.
