"A mi marido le gusta hacer el sexo como los perritos". Así les dijo una señora a sus amigas. Comentó una, con pícara sonrisa: "¡Míralo! ¡Qué travieso!". "No -aclara la señora-. Le gusta hacerlo como los perritos porque cuando le pido sexo se tira panza arriba y hace el muertito"... El niño estudiaba su lección de Biblia. "Papi -pregunta- ¿por qué se dice que el Jardín del Edén era un paraíso?". "Bueno -le explica el señor-. Adán era hombre; Eva era mujer; y todavía no se inventaban los dolores de cabeza"... Hubo reunión de familia. Se juntaron las sobrinas jóvenes con las tías mayores, todas las cuales habían sido muy prolíficas: la que menos hijos tuvo trajo ocho al mundo. Una de las sobrinas se puso a hablar de la liberación femenina. Proclamó: "Las mujeres queremos ya escapar de la cocina". "No entiendo -se sorprendió la tía que más hijos había tenido (15)-. En mis tiempos lo que queríamos las mujeres no era escapar de la cocina: era escapar de la recámara"... Capronio, ruin sujeto, fue al consultorio del dentista. Lo acompañaba su mujer. "Doctor -dijo Capronio con ronca voz al médico-. Vengo por causa de una muela. Pero llevo mucha prisa, de modo que olvídese usted de la anestesia y proceda inmediatamente a extraer la muela, así, en frío". "-Caramba, amigo -se sorprendió el facultativo-. Es usted muy valiente. A ver, ¿cuál es la muela?". "Martiria -le ordena Capronio a su mujer-, enséñale al doctor la muela que te duele"... Llegó al banco una estupenda morenaza de esculturales formas y ubérrimos encantos anatómicos. Le dice al empleado de la ventanilla: "Quiero una cuenta de cheques mancomunada". "Claro que sí -responde él-. Mancomunada ¿con quién?". Replica ella: "Con alguien que tenga mucho dinero"... Nadie debería dar por muerto y sepultado a López Obrador. Si en la elección presidencial del 2012 salen a votar los que no tienen voto, él podrá conseguir el propósito al que se aferra todavía con tesón de caudillo iluminado. "La izquierda unida jamás será vencida". Eso dice el ya antañón eslogan. El problema es que la izquierda nunca se une, como lo muestra el anuncio que antier hizo López Obrador en el sentido de que otra vez buscará ser candidato. Desunida así la izquierda por su causa, y dividido el voto de la clase media entre el PRI y la alianza que muy posiblemente trabarán el PAN y el PRD, las probabilidades de AMLO crecen. Eso, claro, si el día de la elección hablan los millones de mexicanos que sólo ese día tienen voz... Le preguntaron a Pirulina: "¿Cuál es la diferencia entre vergüenza y pena?". Respondió ella: "Hacer ciertas cosas es una vergüenza; pero no hacerlas es una pena"... Uglilia era más fea que un coche por abajo. En una fiesta en su casa les dijo con travieso mohín a sus amigos: "El que adivine cuántos años tengo podrá pasar conmigo un agradable rato". Dijo uno: "Mil quinientos años". Uglilia lo tomó de la mano y lo encaminó a la recámara al tiempo que le decía: "Le atinaste; años más, años menos"... Don Senilio, señor de edad madura, se iba a casar con Pomponona, mujer florida y en plena flor de edad. A fin de cumplir con el débito conyugal a que lo obligaba su condición de esposo se tomó una pastilla de Viagra. Pensó, sin embargo, en los frondosos atributos de su desposada, y se tomó otra, y otra, y otras más. Su organismo no pudo con la copiosa dosis, y el flamante novio, aun antes de comenzar la noche de las nupcias, entregó el alma a quien se la dio. El empresario de pompas fúnebres le preguntó a Pomponona: "¿Qué traje le ponemos al señor?". "No sé -vacila ella-. Alguno que vaya bien con el azul". (¡Qué barbaridad! ¡A fuerza de tanto Viagra el pobre don Senilio había adquirido ese color!)... FIN.
