Torreón Calidad del aire Peregrinaciones Tránsito y Vialidad

DE POLÍTICA Y COSAS PEORES

ARMANDO CAMORRA

Se casó Babalucas. A su regreso de la luna de miel un amigo le preguntó cómo le había ido con su flamante esposa. "Muy bien" -respondió el badulaque. Y luego, bajando la voz, añadió como en secreto: "Y una cosa te diré: por la forma en que actuó, creo que hubiera podido yo tener sexo con ella"... El farmacéutico vio que su dependiente estaba riñendo a golpes con un tipo. Acudió corriendo, y después de separarlos le preguntó al muchacho la causa de la pelea. Explica el dependiente: "El señor me pidió un supositorio que le recetó su médico. Se lo di. Me preguntó dónde se lo debía poner. Se lo dije. Así comenzó el pleito"... Saltillo ofrece vino viejo en botellas nuevas. Quiero decir que es al mismo tiempo ciudad colonial y modernísima. El 25 de julio, día del apóstol Santiago, cumplió 433 años de edad, y los festejó con el talante de una comunidad que ha sabido conservar plenamente sus raíces y al mismo tiempo ser la capital de Estado con mayor y más rápida transformación en el país. Lo prueban los museos -más de 20- en que Saltillo muestra orgullosamente su pasado, y las nuevas vialidades -más de 30- que permitirán atravesar de un lado a otro la ciudad, o circundarla, sin detenerse en un solo semáforo. Y conserva sus tradiciones mi ciudad. Aún se escuchan serenatas en sus calles, trazadas por los padres fundadores siguiendo el sinuoso curso de los cauces de agua que bajaban desde la sierra de Zapalinamé. Yo mismo, cuando era aún más joven de lo que ahora soy, llegué guitarra en mano y corazón en boca a alguna reja de hierros vizcaínos a cantar las antiguas endechas saltillenses: "Eres la inspiración de mi vida; de mi vida que es para ti..."; "Quisiera ser rayo de luna que ponga en tus ojos destellos de amor..."; "Como un sol tempranero radiante de luz, así, niña adorada, así has llegado tú...". Pervive esa cantora vocación. Las notas de la Rondalla de Saltillo se han oído en millones de discos en todo el continente. Y una voz se ha escuchado: la de Marco Antonio Aguirre Perales, que en su palabra dice los amores de los que no tienen palabras para decir su amor. El día del aniversario recibió Marco la Presea Saltillo, galardón el más alto que el Cabildo entrega a quienes han dado lustre a su ciudad. La recibió de manos del Gobernador Moreira, quien destacó la forma en que el poeta de las rondallas ha llevado el nombre de Saltillo por todo México, y por el extranjero. En esta época en que parece que no hay ya buenos sentimientos, hablar de ellos no es ser sentimental, ni sensiblero: es ser sensible. Marco Antonio Aguirre Perales ha hablado durante mucho tiempo, con su privilegiada voz, del más cálido sentimiento: el del amor. Por eso mereció el premio que Saltillo entrega a sus mejores hijos. Aquí le expreso a Marco, a quien mil veces he encontrado en los caminos de la juglaría, mi afecto de todos los años, mi admiración de siempre... Don Astasio llegó a su casa y sorprendió a su esposa en brazos de un desconocido. Desconocido para él, claro, pues la señora demostraba tener conocimiento previo del individuo: con música de "El Relicario" le cantaba, siguiendo el ritmo de sus menos eróticos: "Pisa, moreno, pisa con garbo...". Fue don Astasio al chifonier donde guardaba una libreta con adjetivos denostosos para decir a su mujer en tales ocasiones, y de regreso en la alcoba le espetó un dicterio que había espigado en el Diccionario de la Academia. La llamó: "¡Piltraca!". Eso significa "mujer despreciable". Seguidamente don Astasio fue hacia el sujeto, que se había vuelto a poner apresuradamente la ropa que llevaba antes de comenzar el pecaminoso trance, y tomándolo por las solapas empezó a sacudirlo con singular vigor. Le dijo su señora: "Ten cuidado, Astasio. Ésa es tu mejor piyama"... FIN.

Leer más de Torreón

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Torreón

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 543776

elsiglo.mx