Torreón Calidad del aire Peregrinaciones Tránsito y Vialidad

DE POLÍTICA Y COSAS PEORES

ARMANDO CAMORRA

La señora quería una casa más grande. Le dice su marido, burlón: "Pinta los cuartos de amarillo. He oído que pintadas de ese color las cosas se ven mucho más grandes". Esa misma noche la señora entró en la alcoba con un bote de pintura amarilla y una brocha. Le dice a su marido al tiempo que le pintaba la entrepierna: "Vamos a ver si lo que me dijiste es cierto"... Un mozalbete recién casado se presentó ante el juez a pedir el divorcio. "¿Por qué te quieres divorciar?" -le pregunta el juzgador. Responde el muchacho: "El papá de mi esposa me engañó". "No entiendo -se desconcierta el juez-. ¿Por qué dices que te engañó?". Explica el galancete: "El rifle con que me amenazó para que me casara con su hija no tenía balas"... Un amigo de Babalucas lo invitó al recital de cierta famosa soprano. Cuando la artista apareció en escena dice el amigo: "Esa cantante tiene un gran repertorio". Comenta Babalucas: "Y de adelante tampoco está mal"... Hay una película de Ingrid Bergman ya casi olvidada. Es de 1941, y se llama "Adam had four sons". Los críticos no la califican bien; la consideran un melodrama cuyo final se adivina desde antes de que se apaguen las luces de la sala. En el film aparece una Susan Hayward jovencísima sobreactuando su papel de mujer mala. Ver, sin embargo, el rostro de Ingrid Bergman es una suprema experiencia cinematográfica. Sin hablar podía decirlo todo. Por eso la tal película, con casi todas las suyas, forma parte de mi gran repertorio de nostalgias. En ella triunfa el bien sobre las insidias y asechanzas del mal. Eso no sucede ahora en la vida real. Parece en estos tiempos que la maldad lleva ganada la batalla, y que el bien retrocede, temeroso. Y sin embargo hay más gente buena que mala. Por cada perverso que daña a los demás existen cien o mil hombres y mujeres que cada día se esfuerzan por ganar el pan con su trabajo; que procuran dar a sus hijos lo mejor; que buscan el calor de la familia y los amigos; que a veces se sacrifican por los que aman, y cumplen todos los días, calladamente, su labor. Yo pienso que al final ellos prevalecerán. Existirá siempre la maldad -la mala semilla forma parte de lo humano-, pero la vocación del hombre lo lleva a buscar el bien; a procurar la justicia, la verdad, la belleza, y ese supremo sentimiento que perpetúa la vida y le da su sentido: el amor. No sé mucho de cine, y menos aún sé de filosofías, pero estoy cierto de que la película del hombre, igual que aquel film olvidado de Ingrid Bergman, tendrá final feliz... El astuto abogado defendía a un individuo acusado de perjurio. "Mi cliente no mintió en el juicio -dijo en su alegato-. Se equivocó, que es diferente. Todos podemos equivocarnos. Yo, por ejemplo, habría jurado al llegar aquí que traía mi reloj; pero de pronto recordé que se me quedó en la casa. Lo puse en el botiquín del baño mientras me rasuraba, y luego olvidé ponérmelo. Cualquiera puede cometer una equivocación así". Cuando el abogado regresó a su casa por la noche le dijo su señora: "¿Tanto necesitabas tu reloj que mandaste por él?". "A nadie envié por mi reloj -replica con desconcierto el abogado-. ¿Por qué me dices eso?". Responde la señora: "Vino un sujeto y dijo que lo habías mandado por el reloj que habías dejado en el botiquín. No dudé en entregárselo, porque el tipo sabía exactamente dónde estaba, y nadie más que tú pudo decírselo"... Llegó Susiflor a su casa, y con lágrimas en los ojos le preguntó a su padre: " ¿Verdad, papá, que siempre has dicho que el honor de las mujeres de esta familia se ha transmitido de generación en generación?". "Así es, hija mía" -confirma solemnemente el genitor. Declara Susiflor rompiendo en llanto: "¡Pues en la generación que represento se acaba de detener la transmisión!"... FIN.

Leer más de Torreón

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Torreón

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 545937

elsiglo.mx