Facilda Lasestas fue a confesarse con el buen padre Arsilio. Le dijo que tenía frecuente trato de carnalidad con varios hombres. “Soy una mujer débil” -explicó. Le preguntó, severo, el padre Arsilio: “¿Y acaso eso que tienen los hombres es tonificante?” ... Un señor y su hijo estaban en la cantina. El señor se hizo de palabras con un rudo sujeto, y éste le dio una trompada que lo tiró por tierra. “¿Por qué golpea usted a mi papá, cobarde? -clamó el hijo-. A ver, si es tan hombre péguele otra vez”. El hombre le dio una segunda trompada al señor, que cayó otra vez al suelo. El hijo lo ayuda a levantarse y le dice: “Mejor vámonos, ‘apá; si no este salvaje también a mí me va a golpear”. Lord Feebledick llegó a su casa después de la cacería de la zorra y encontró a su mujer Lady Loosebloomers, en ajustado trance de concúbito con Wellh Ung, el toroso mancebo encargado de la cría de los faisanes. “Señora! -le dijo milord en tono de reproche-. ¿Y con un mozo del servicio?”. Respondió Lady Loosebloomers: “Era esto, o aumentarle el sueldo”... 1989 fue un año fatal para el beisbol. El gran terremoto de San Francisco interrumpió la Serie Mundial entre los Gigantes y Oakland (los Gigantes fueron barridos en cuatro juegos). Pete Rose quedó expulsado de por vida del deporte a causa de su afición a las apuestas. Uno de sus juzgadores, el comisionado Bart Giamatti, murió de un infarto provocado quizá por la tensión que le causó el asunto. Billy Martin, legendario pelotero de los Yankees, pereció en un accidente de automóvil. Y dos extraordinarios jugadores, Steve Garvey yWade Boggs, se vieron envueltos en tremendos escándalos sexuales. Garvey, en vísperas de su matrimonio, fue demandado por dos mujeres a quienes había embarazado meses antes. Garvey era llamado “Mr. Clean” por su buena conducta y su religiosidad. De Wade Boggs se supo que tenía dos mujeres: una en casa y otra que lo acompañaba cuando salía de gira con el equipo. Esta última, de nombre Margo Adams, se enfureció al saber que Boggs tenía otros amores. Se vengó de él acostándose con Steve Garvey (“Mr. Clean”, a sus órdenes), y hablando de su relación con Boggs en una entrevista para la revista “Penthouse”, por la cual recibió 100 mil dólares de pago. Esos problemas hicieron que bajara el rendimiento de Boggs en el diamante: por primera vez en cinco años no obtuvo la corona de bateo en la Liga Americana. A pesar del escándalo, la esposa de Boggs lo perdonó. Dijo él: “Ahora nuestro matrimonio es más fuerte que nunca”. ¡Gloria eterna a la esposa deWade Boggs!... Los pleitos internos en el PAN son ya bastante externos, y harán más grave aún la difícil situación del partido blanquiazul de cara a la elección presidencial. Según se ven las cosas, sería un milagro que Acción Nacional ganara una tercera vez. Y el partido que fundó GómezMorín se ha alejado tanto de su fuente original que ya los milagros no forman parte de su capital político... Astatrasio Garrajarra llegó a su casa en horas de la madrugada, y poseído por los espíritus del vino. Su mujer, que esa noche estaba llena de amorosas ansias, en vez de reprenderlo se mostró a él vestida sólo con un vaporoso negligé. Al verla así le hizo Astatrasio: “¡Bu!”. Ella, sorprendida, le preguntó. “¿Por qué me haces así?”. Tartajeó Garrajarra: “Es que en el estado en que vengo lo único que puedo pegarte es un susto” ... En el zoológico Pepito le comentó a su mamá: “¡Mira! ¡Aquel orangután se parece al tío Primacio!”. “¡Niño! -lo amonesta la señora-. ¡Esas cosas no se dicen!”. “Qué importa, mami -responde Pepito-. El orangután no entiende” ... Doña Pompilia se sentó en una banca del parque a descansar, pues le apretaban los zapatos. Se los quitó, y extendió las piernas en la banca. En eso llegó un vagabundo, y al verla empezó a despojarse de sus ropas. Exclamó ella: “¿Qué hace usted, inverecundo majadero?”. Respondió el vago: “Como estás en mi cama, linda, y ya descalcita...” FIN
