La bancada del PRI en el Senado rechazó la propuesta del Gobierno Federal para desaparecer de tajo a las Policías municipales, pero impulsará una reforma constitucional que dejará en manos de los gobernadores la decisión de integrar un mando único policiaco.
De acuerdo con un documento interno de la bancada tricolor, la intención es que, por mandato constitucional, las leyes estatales establezcan en qué casos los mandatarios pueden asumir directamente el control de las corporaciones municipales.
En la propuesta de reforma, que fue presentada por el presidente de la Comisión de Gobernación del Senado, Jesús Murillo Karam, también se plantea modificar el Artículo 21 de la Carta Magna, con la finalidad de que la Ley detalle la distribución de competencias entre las policías federal, estatal y municipal.
"Esto permite definir para cada tipo de Policía las funciones de las que son responsables", explica.
De aprobarse la reforma, que será presentada en el próximo periodo ordinario de sesiones, la Ley del Sistema Nacional de Seguridad establecerá las responsabilidades y funciones de los cuerpos de Policías federal, estatal y municipal.
Con este planteamiento, el PRI busca impulsar un "modelo policiaco flexible", con modificaciones mínimas a la Constitución, sin crear una Policía nacional ni desaparecer a las municipales.
