Demanda. En la imagen el director general de Servicios Legales de la Consejería Jurídica del DF y representante legal, León Javier Martínez Sánchez entrega el documento contra los prelados. EL UNIVERSAL
El jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, informó que ayer se presentó una demanda civil en contra del cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, y el vocero de la Arquidiócesis de México, Hugo Valdemar, por daño moral.
La demanda ante el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal se produjo luego que Sandoval Íñiguez se negó a retractarse del señalamiento que hizo el domingo pasado, cuando dijo que Ebrard había "maiceado" (sobornado) a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para que avalaran la adopción de niños por parte de matrimonios del mismo sexo, lo que fue apoyado por Valdemar.
Marcelo Ebrard afirmó que en su demanda se plantea la reparación de daño moral por los "falsos" señalamientos de los religiosos y que ambos acusados están violentando claramente el Artículo 130 Constitucional y la legislación vigente en este país, que separa al Estado laico de las iglesias en general.
La presentación de esta demanda ante el Tribunal tiene el propósito de hacer comparecer a los dos líderes católicos para que presenten las pruebas de su dicho "que sabemos no tienen", o en su caso se retracten y reparen el daño, indicó.
El jefe de Gobierno insistió en que Sandoval Íñiguez y Hugo Valdemar han injuriado sin fundamento alguno y dijo que no se podía permitir que este asunto se quede así porque sería tanto como consentir que se ponga en riesgo la naturaleza del Estado laico.
En México -agregó- se vive un Estado laico. Hace más de 140 años se impuso la separación definitiva entre asuntos religiosos y civiles.
"Nadie está por encima de la Ley, así sea cardenal, arzobispo o lo que sea", señaló.
SERÁ IMPARCIAL: TSJDF El presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJDF), Édgar Elías Azar, dijo que está garantizado el proceso que se le dé a la demanda interpuesta por el Gobierno del Distrito Federal contra el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, y el vocero de la Arquidiócesis de México Hugo Valdemar; también dejó entreabierta la posibilidad que los clérigos sean llamados a declarar en torno a esta denuncia.
Dijo que se trata de un asunto de daño moral más que entra al TSJDF y que en este caso es relevante por los actores del pleito que son figuras prominentes; sin embargo, es un asunto como hay muchos en los juzgados del Distrito Federal.
Señaló que aún no se puede hablar de acciones, pues se tendrán que revisar los argumentos de las partes, además de cuáles son los motivos de la demanda en contra de los religiosos, aunque estimó que seguramente se estará alegando por parte del Gobierno capitalino una sentencia a favor que determine si hay daño moral por las declaraciones vertidas de los obispos en los medios de comunicación.
Mencionó que por ahora el TSJDF recibió la demanda por escrito a través de computadora al juzgado II y estará ante una jueza con mucha antigüedad con mucha experiencia, por lo que se garantiza que el proceso será imparcial y apegado al código de procedimientos civiles.
Elías Azar reiteró que no hay ninguna presión por parte de nadie hacia este órgano judicial, es un asunto más que entra a los juzgados "si nos dejáramos presionar, en este momento estaríamos claudicando como jueces". El resultado será dictado conforme a derecho".
Detalló que el cardenal Sandoval Íñiguez y Valdemar presentarán sus pruebas como cualquier otro ciudadano y tendrá que ser emplazado conforme a derecho.
Valdemar acusa a Ebrard de persecución religiosa
El vocero de la Arquidiócesis de México, Hugo Valdemar, dijo ser víctima de persecución religiosa por parte de Marcelo Ebrard.
Afirmó que sostiene sus declaraciones, que no se disculpará, ni se desdice de que leyes como el aborto promovidas por el Gobierno del Distrito Federal han ocasionado más muertes que el narcotráfico.
Lejos de ofrecerle disculpas a Marcelo Ebrard, de quien dijo ignora la historia del siglo XIX, lo acusó de hacer un uso desproporcionado del poder, de utilizar recursos públicos para demandarlo a él y al cardenal Juan Sandoval en un afán de tomar venganza.
Además que por el hecho que los dos ministros ejerzan su libertad de expresión, el funcionario ha emprendido una persecución religiosa de tipo "legaloide". Valdemar consideró: "Es preocupante que un gobernante que está sometido a la observación, escrutinio y crítica de sus gobernados, no soporte una crítica y use todo el aparato de poder para reprimir a dos ciudadanos (a Juan Sandoval y a él).