Demanda. Habitantes de San Dimas no se niegan a los operativos militares en sus comunidades, siempre y cuando no cometan los abusos de la última semana.
Allanamientos, robos y agresiones por parte de elementos del Ejército Mexicano es lo que denunciaron cerca de 300 familias que viven en tres comunidades del municipio de San Dimas.
IRRUMPEN EN PALACIO LEGISLATIVO
Casi un centenar de habitantes de las comunidades San José de Causas, La Desmontada y San José acudieron al Congreso del Estado a manifestarse con cartulinas y gritos de consigna, para pedir apoyo a los diputados locales ante los abusos cometidos por los militares que llegaron a San Dimas desde el pasado miércoles.
La irrupción a media sesión ocasionó que se nombrara una comisión especial para atenderlos en una sala alterna, donde los de San Dimas afirmaron que la mañana del miércoles llegaron cuatro vehículos con al menos seis militares a bordo cada uno, mismos que se metieron a las casas sin motivo para hacer cateos.
Al salir los militares, los dueños se percataron de que les faltaban artículos; incluso prendas íntimas. Una madre de familia señaló que los soldados la sacaron de su casa y se quedaron viviendo ahí durante los cinco días que estuvieron en La Desmontada. Otra dijo que cuando se fueron los soldados se llevaron su camioneta.
Auxilio
Los manifestantes pidieron ayuda antes de que se registrara un enfrentamiento, pues los padres de familia y las mujeres no están dispuestos a soportar más abusos, sobre todo porque cuando venían a Durango se percataron de que había otros cuatro comandos que iban llegando a sus comunidades.
Todos interpusieron su queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
