Van 5 casos. El pasado lunes tres de mayo estalló un explosivo en un cajero del DF. El martes policías lograron desactivar otro artefacto en un centro comercial.
En poco más de cuatro meses suman cinco los ataques con artefactos explosivos a cajeros automáticos de sucursales bancarias. Esta vez tocó el turno a una plaza comercial del Estado de México, pero el artefacto explosivo no detonó.
Reportes de la Agencia de Seguridad Estatal indican que alrededor de las 22:00 horas del martes fue hallado un artefacto explosivo en uno de los pasillos de la plaza Atizapán, frente al local A-5, ocupado por el despacho González y González Abogados.
Dicha plaza se localiza sobre la carretera Atizapán-Nicolás Romero, a la altura de la colonia Lomas Lindas, y el artefacto explosivo estaba dentro de un carro de supermercado, en donde había un tanque de gas LP de cinco kilogramos, tres latas de refresco y cables diversos para hacerlo estallar.
La Agencia de Seguridad Estatal (ASE) indicó que dicho hallazgo generó intensa movilización de cuerpos de seguridad pública y rescate, por lo que a las 22:10 horas la plaza comercial estaba llena de policías y elementos de Protección Civil municipales.
A las 23:17 horas del martes fue desactivado el artefacto y trasladado por expertos de la ASE a un sitio seguro, en donde se confirmó que las latas de refresco no contenían pólvora, como se manejó en principio.
La ASE informó que en los cinco casos registrados se trata de artefactos explosivos caseros y su detonación no ha causado víctimas, además de que ninguna organización se ha atribuido los ataques.
