Riesgo. La descarga de aguas residuales en los afluentes puede ser factor de enfermedades. EL SIGLO DE DURANGO
Hasta hace poco tiempo, en localidades como El Nayar, se hacían descargas de aguas residuales al cauce del río Tunal, problema que se ha erradicado; no obstante, aún hay rancherías y establos alejados de las zonas urbanas en los que esta práctica prevalece.
Así lo dio a conocer José Marcos Daniel Trujano Thomé, secretario de Recursos Naturales y Medio Ambiente del Estado, quien platicó que en localidades como El Nayar, municipio de Durango, había renuencia a dejar de hacer descargas de aguas residuales a pesar de ya contar con un sistema de drenaje.
Sin embargo, luego de mantener una serie de pláticas y acercamientos con los vecinos que incurrían en estas prácticas, se ha logrado abatir este problema.
Trujano Thomé indicó que se trabaja en torno a este tema, sobre todo en las ciudades y cabeceras municipales de la entidad, con la finalidad de evitar que se siga presentando la contaminación de ríos y arroyos.
COOPERACIÓN
Esto, mediante exhortos que los mismos ayuntamientos emiten, en coordinación con esta Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Y es que la ciudadanía entiende que no tiene caso contaminar los afluentes cuando se tienen otras alternativas.
Hay avance en las principales urbes y cabeceras, pero se sigue presentando este inconveniente en las localidades más pequeñas, sobre todo en donde no se cuenta con la infraestructura adecuada para el confinamiento de las aguas residuales.
El entrevistado añadió que aún hay muchos establos que siguen vertiendo sus desechos residuales en los afluentes.
