Desdeñan escuelas deporte
La Secretaría de Salud no sólo atribuye la mala calidad de la alimentación infantil a las escuelas del país, sino también la inactividad física.
La dependencia detectó que al ingresar a la primaria, los niños son mucho más propensos a engordar y criticó la amplia e innecesaria oferta de alimentos en las cooperativas escolares.
Ahora, la Secretaría reporta, a partir de un diagnóstico realizado por la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), que la falta de interés que tienen los centros escolares del país por el deporte es una de las razones por las que se carece de una cultura de la actividad física, lo que fomenta la obesidad.
"Se le da poco valor curricular y nula importancia a las clases de educación física, lo que hace que los estudiantes no desarrollen ni afición por el deporte ni interés por aprender acerca de su relación con la salud", indican las Bases Técnicas del Acuerdo Nacional por la Salud Alimentario, eje de la política contra la obesidad de esta administración.
Agrega que la Conade encontró que la educación física apenas está presente en las escuelas mexicanas, con pocas horas "o a veces ninguna" para esta actividad, además de que las clases suelen tener poca calidad.
"Los jóvenes de entre 14 y 18 años dejan de practicar deporte porque la materia deja de ser obligatoria en el bachillerato", critica.
Agrega que a nivel nacional se carece de maestros de educación física para cubrir las necesidades de las escuelas, además de que reitera que éstas no tienen las instalaciones adecuadas para realizar deporte y mucho menos equipo para hacerlo.
"Un estudio reciente del Instituto Nacional de Salud Pública documentó que el tiempo de actividad física moderada o vigorosa en escuelas de la Ciudad de México, incluida la actividad durante las clases de educación física y el recreo, es de sólo 60 minutos a la semana, lo que equivale a sólo una quinta parte del mínimo de actividad recomendado para niños en edad escolar, de 45 minutos diarios", advierte.
A esto se suma que la mayoría de los adolescentes se declara inactivo en su vida cotidiana y pasan muchas horas a la semana realizando actividades sedentarias, como ver la televisión.
"Únicamente el 35 por ciento de los adolescentes de 10 a 19 años de edad puede considerarse activo. Más del 50 por ciento de éstos ve 14 o más horas de televisión a la semana.
"En este grupo de edad, la inactividad física no sólo contribuye al desarrollo de enfermedades crónicas no transmisibles, también puede predisponer a enfermedades mentales, adicciones, acumulación de estrés y a un menor rendimiento escolar, incluso puede tener un efecto negativo en la interacción social", plantea.
En el caso de estudiantes de nivel primaria, de acuerdo con las bases técnicas del Acuerdo Nacional para la Salud Alimentaria publicadas esta semana, mientras que sólo el 5 por ciento de los niños de entre uno y 5 años de edad presenta sobrepeso, cuando entran a este nivel educativo, a los 6 años, la cifra se eleva al 25 por ciento.
