Despedida. El llanto se apoderó de los familiares del oficial Abel González, que fue despedido con honores en Seguridad Pública. EL SIGLO DE TORREÓN
En una fugaz ceremonia, se despidió con honores a uno de los agentes de Seguridad Pública que murieron en el cumplimiento de su deber, a manos de sujetos armados. La despedida del otro agente es el jueves 24 por la mañana.
Abel González García, de 41 años de edad, acudió, por última vez al edifico de Seguridad Pública de Torreón en un ataúd. Sus compañeros y familiares lo aguardaban. Una guardia de honor se montó junto a sus restos, a las 15:30 horas.
Ocho minutos duró el acto, que inició con palabras de un oficial que hizo pública la indignación, y casi sin palabras, pidió una oración para su compañero caído, asegurando que su muerte confirma el compromiso que tienen los policías para servir a los ciudadanos de Torreón.
Otro oficial tomó la voz y calificó de cobarde el doble homicidio contra Abel y Luis Fernando Alanís Rocha, de 28 años de edad, cometido a las 14:15 horas del martes 29 de junio del presente año.
Con el "pase de lista" se estremecieron los presentes al escuchar tres veces el nombre del oficial Abel González García.
Los disparos de las "salvas de honor" asustaron a los familiares de Abel, que rompieron en llanto, principalmente mujeres y niños, ya que la maestra de ceremonias omitió avisar que se realizarían disparos al aire, generando desconcierto.
Sin aviso previo, inició el "toque del silencio", tonada obligada en estas ceremonias luctuosas.
En el programa original se contemplaba un mensaje del director de la Policía Municipal, Bibiano Villa, pero el militar retirado no tomó el micrófono. Y para finalizar, Villa encabezó el relevo de la guardia de honor, para dar por terminada la ceremonia.
LA INVESTIGACIÓN En la Fiscalía General del Estado siguen con las primeras diligencias del doble homicidio contra los oficiales.
Se conoció que los agentes iban a un reporte de robo en una gasolinera y la patrulla incendiada era la segunda del convoy, que fue atacada en Constitución y Sertoma por sujetos armados.
Los agentes tenían heridas de bala en cabeza, tronco, brazos y piernas.