Después de 50 años
Es una fortuna conservar los edificios que nuestros ancestros construyeron hace aproximadamente 150 años.
Hoy, en cada esquina del Centro, te puedes encontrar botes para depositar la basura, pero tienes que fijarte en los colores. El azul es para las botellas de plástico, el amarillo para papeles, en el rojo se tiran pilas, en el plateado latas, el blanco es para el vidrio y el verde para lo orgánico. Y uno más en color negro para lo no mencionado.
Los carros ya no transitan la avenida Morelos, únicamente lo hacen los autobuses, que entran al Centro por las calles, Javier Mina, Jiménez, Galeana o Ramón Corona, según sea su recorrido. Los que van de Poniente a Oriente, hacen su llegada por la calle Múzquiz o por Ramos Arizpe. De esta manera se ha reactivado el comercio en nuestra querida avenida Morelos. Por las otras avenidas circulan solamente autos.
Los estacionamientos grandes están situados sobre las avenidas Allende y Matamoros.
Si te subes al autobús desde estas calles que te mencioné, para recorrer únicamente la avenida Morelos poniente, el pasaje es gratis. Esto se ha podido lograr gracias a que se ha adquirido para los autobuses un sistema de energía solar, provocando también una tarifa menos costosa.
Es un placer por las tardes pasear por la calle Cepeda, ver a los artistas callejeros pintando, cantando, contando historias y haciendo acrobacias. Ya se escucha en el resto del país decir "si fuiste a Torreón y no conociste la Cepeda es como si no hubieras ido". Los viernes y los sábados el ambiente en esta área es muy agradable. Se cierra la calle hasta la avenida Matamoros, siempre dejando libre el acceso de las avenidas para no obstruir el paso de los autos. De esta manera, la gente pasea, cena y se divierte hasta las doce o una de la mañana, pues los restaurantes, bares y cafés permanecen abiertos hasta esas horas. Aunque si vas a regresar a tú casa en autobús, tienes que hacerlo antes de las once y media de la noche, pues a esa hora salen los últimos camiones desde el Centro.
Otro día te cuento más. Me despido deseándole lo mejor a Torreón.
