Cinco presuntos integrantes de la banda de secuestradores M 60, vinculados a la organización delictiva 'La Familia Michoacana', entre ellos una menor de edad, fueron detenidos ayer miércoles en esta capital y presentados esta mañana en el Centro de Mando de la Policía Federal en Iztapalapa, al oriente de la ciudad.
La banda, dedicada también a la venta de droga al menudeo, era dirigida por Francisco Javier Carmona Rangel o César Ortega García, “El M 60”, de 22 años, originario del Distrito Federal y quien fungía como presunto sicario de la organización y jefe de las plazas de Naucalpan, Coacalco, Tultitlán y Ecatepec.
Con él fueron detenidos Uriel Flores Sepúlveda, “El Charras”, de 27 años, presunto sicario e informante originario de Michoacán; Francisco Alejandro Morales García o Francisco José Hernández Ramírez, “El Pez”, de 19 años; Edgar Alan Felipe Hernández, “El Marino”, y la menor María del Consuelo "N", de 17 años.
Morales García y Felipe Hernández brindaban también protección al jefe de la banda y se encargaban de cuidar a las víctimas de secuestro. La menor era sobrina del líder de la organización delictiva y pareja de uno de los detenidos.
A la banda se le relaciona con varias ejecuciones cometidas en el Valle de México, entre ellas la de la titular de la 2a. mesa de investigaciones de la Unidad Mixta de Atención al Narcomenudeo (UMAN) de Ecatepec, ocurrida el 13 de noviembre de 2009, y de otras personas cuyos cuerpos fueron abandonados con mensajes en contra del director de la Policía Judicial del Estado de México.
El grupo delictivo también se encuentra relacionado con un enfrentamiento ocurrido el pasado 11 de enero con elementos de diversas corporaciones policiacas en Tultitlán, estado de México, que dejó como saldo dos policías municipales de Coacalco y Tultitlán así como un automovilista muertos y tres policías federales y un estatal lesionados.
De acuerdo con la base de datos de la Policía Federal, la organización secuestraba sus víctimas en las inmediaciones de sus domicilios o negocios con lujo de violencia y armas de grueso calibre, y exigían fuertes cantidades de dinero por su rescate, aunque en la mayoría de los casos las víctimas eran ejecutadas días después.
Los detenidos están relacionados con cinco averiguaciones previas iniciadas ante la Procuraduría General de la República (PGR) y fueron capturados en las inmediaciones de la estación del metro Valle Gómez en esta capital, cuando circulaban a bordo de un vehículo descapotable negro.
Al ser detenidos se les aseguraron un arma corta, 82 envoltorios de cocaína, cinco teléfonos celulares y un radio de comunicación.