Elementos de la policía municipal de Puebla aprehendieron al periodista Irineo Mujica Arzate por el supuesto delito de alteración al orden público, porque el informador realizó una huelga de hambre para exigir respeto a los derechos humanos.
Los hechos se registraron en la avenida Independencia 349 en la colonia Chapultepec de esa ciudad donde el agraviado emprendió una abstención alimenticia en repudio a la coartación de la libertad de que fue víctima.
La excusa de la corporación policiaca radicó en la presumible alteración al orden colectivo y la invasión de la vía pública, por lo cual el reportero tendría que pagar una fianza luego de que fuera presentado en el Juzgado Calificador de la colonia México 68.
La huelga que inició desde el medio día en la sede de la Estación Migratoria en Puebla pretendía presionar a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para que actúe contra el Instituto Nacional de Migración por las agresiones que agentes de ese organismo emprendieron contra Mujica.
Durante horas permaneció encadenado y con una mordaza en la boca, creada con cinta adhesiva con la leyenda 'El silencio mata'. El físico del hombre permitió ver las secuelas de la golpiza que le dieron los funcionarios del INM.
Juan de Dios García Davish, también periodista y acompañante de Mujica, informó que los agentes del INM golpearon fuertemente a Irineo, le arrebataron su cámara fílmica y le robaron 9 mil 890 pesos en efectivo y un teléfono celular.
El único 'error' de Mujica fue viajar en el mismo tren que al menos siete decenas de indocumentados abordaron para viajar de manera ilegal a México, para posteriormente cruzar la frontera de Estados Unidos.