“Algunos venezolanos enfermos de odio y sin razón siguen diciendo que esto es una dictadura. No sé de dónde pueden sacar eso.”
Hugo Chávez
Hugo Chávez quiere utilizar las armas de la democracia para destruir la democracia. No es el primero que lo hace: Adolf Hitler asumió el gobierno de Alemania en 1933 gracias a un proceso democrático, pero aprovechó su poder para nulificar todas las instituciones democráticas del país.
En las últimas semanas la Asamblea Nacional de Venezuela ha hecho una amplia serie de reformas para concentrar un mayor poder en manos de Chávez. Los legisladores tienen prisa. El Partido Socialista Unido de Venezuela del presidente perderá su mayoría calificada de dos terceras partes, que le permite cambiar la Constitución a voluntad, el próximo 5 de enero.
La Asamblea, por ejemplo, ha aprobado una "Ley Habilitante" que le permitirá al presidente gobernar por decreto a partir de enero. Esto convierte a Chávez, de manera legal, en un verdadero dictador.
Otras medidas restringen la libertad de expresión y organización política. La Ley de Responsabilidad Social le da al gobierno facultades para censurar y sancionar los contenidos de radio, televisión e Internet que "fomenten zozobra en la ciudadanía o alteren el orden público", "inciten o promuevan la desobediencia al régimen jurídico vigente", "desconozcan a las autoridades legítimamente constituidas" o "inciten o promuevan el odio o la intolerancia". El gobierno podrá ordenar a los servicios de Internet que restrinjan el acceso a sitios o portales que, a su juicio, incurran en estas prácticas. La nueva Ley Orgánica de las Telecomunicaciones establece que radio, televisión e Internet constituyen un servicio público "reservado al Estado" por lo que el gobierno podrá suspender o revocar licencias cuando "lo juzgue conveniente".
Otra medida impide a los parlamentarios pasarse a un partido distinto al que los postuló. Con esto la Asamblea busca evitar que los legisladores leales a Chávez se unan a la oposición.
Los legisladores chavistas han prohibido a las ONGs recibir dona'ciones del exterior. Los extranjeros que emitan opiniones que "ofendan las instituciones del Estado, sus altos funcionarios o atenten contra el ejercicio de la soberanía" serán expulsados del país de forma sumaria y los directivos de las organizaciones que los inviten serán objeto de sanciones y no podrán postularse a cargos de elección popular durante ocho años. No habrá más molestas opiniones de Krauze o Vargas Llosa en Venezuela.
Se ha eliminado también la libertad de cátedra en las universidades, las cuales tendrán que ajustar sus enseñanzas al proyecto político del presidente. La medida generó protestas de estudiantes que fueron reprimidas por las fuerzas de seguridad.
Hugo Chávez ha sido presidente desde 1999. Cambió las leyes del país para permitir su reelección en 2000 y 2006. Su intención es reelegirse una vez más en 2012. Pero no quiere tomar riesgos. Por eso está cambiando las leyes para cargar una vez más los dados a su favor.
Todavía hay, sin embargo, voces que se atreven a protestar contra Chávez. Este 24 de diciembre el cardenal Jorge Urosa-Savino señaló que "quienes dirigen el gobierno deben tener en cuenta la responsabilidad grandísima que tendrán ante la historia y ante Dios si quieren imponer una dictadura totalitaria que ciertamente sería algo terrible para Venezuela". El presidente Chávez respondió calificando al cardenal de "troglodita".
Chávez se enorgullece de haber hecho una "revolución en democracia". En realidad está aprovechando el mandato democrático para destruir a la democracia.
México alcanzará la cobertura universal de salud en 2011 mediante la afiliación de todos los mexicanos de bajos recursos y sin seguridad social al Seguro Popular. Quizá. Pero los mexicanos que quieren acceder a tratamiento médico a través del Seguro Popular saben que éste implica largas esperas y servicio de pésima calidad.
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