"La responsabilidad del
Estado... no puede desaparecer en un mar de formalismos
Mediante los cuales al final nadie es responsable de los hechos, o que lo sean sólo los niveles más modestos de la cadena de mando."
Arturo Zaldívar
Asta dónde llega la responsabilidad de los altos funcionarios? Esto es lo que en el fondo busca definir el dictamen del ministro de la Suprema Corte Arturo Zaldívar Lelo de Larrea sobre la tragedia de la Guardería ABC de Hermosillo.
El documento, que será discutido por el pleno de la Corte a partir del 14 de junio, hace personal y directamente responsables de graves violaciones a las garantías individuales al actual director general del IMSS y a su predecesor, así como al ex gobernador de Sonora y al ex presidente municipal de Hermosillo, entre otros funcionarios.
El ministro Zaldívar reconoce que los funcionarios inculpados no tenían la obligación de "personarse físicamente a fin de inspeccionar los centros" de atención, pero la "supervisión del funcionamiento efectivo de las guarderías" o de las inspecciones de seguridad sí está "dentro de sus atribuciones". Los funcionarios "no instrumentaron políticas" que garantizaran que las políticas de seguridad fueran debidamente cumplidas. Puede faltarse a la responsabilidad, apunta, tanto por actos de comisión como de omisión.
El ex gobernador de Sonora era responsable del Sistema Estatal de Protección Civil y omitió promover la adopción de protocolos de actuación. Por otra parte, los deberes de ejecutar y hacer ejecutar las leyes, y velar por la seguridad y el bienestar de la población, "no son meras cláusulas declarativas desprovistas de contenido".
El que un funcionario pueda haber llevado poco tiempo en sus funciones no lo releva de responsabilidad. "La Constitución no prevé una curva de aprendizaje... Supone la designación de personas capaces y capacitadas para los cargos que ostentan... Si desde el primer día cobran íntegro su salario..., es lógico y razonable suponer que, desde ese primer día, asumen la responsabilidad de la dependencia o entidad que dirigen."
Si el dictamen es aprobado por el pleno, elevará de manera considerable la vara con la que se mide la responsabilidad de los altos funcionarios públicos. De hecho, parecería que no habría ningún alto funcionario que pudiera evitar ser considerado responsable en un accidente como el de la guardería ABC.
La propia información del dictamen, sin embargo, ratifica que la responsabilidad real de la tragedia radica en la Secretaría de Finanzas de Sonora que instaló una bodega irregular junto a la guardería sin respetar las más elementales medidas de seguridad. Las faltas de la guardería no habrían producido por sí solas la tragedia.
El dictamen apunta también que hay faltas en las disposiciones de seguridad en casi todas las guarderías subrogadas del IMSS. Un estudio más amplio demostraría que estas mismas faltas las comparte la enorme mayoría de las instalaciones públicas, y muchas de las privadas, en el país. No estoy seguro, sin embargo, si el presidente de la Corte y la Judicatura Federal debería ser responsable de la falta de cumplimiento de las reglas de seguridad en todos los tribunales del país o en las guarderías adscritas a los juzgados.
Hay una enorme presión pública para responsabilizar a algunos "peces gordos" por una tragedia que ha enfurecido a la nación mexicana. La verdadera razón del accidente, sin embargo, es la falta de conciencia de seguridad en el país. No sorprende tanto el incendio de la guardería ABC como el que estas tragedias no sean más comunes ante la falta o violación de medidas de seguridad.
BAR BAR
Informa Simón Charaf, dueño del Bar Bar, que el gerente Carlos Cázares Ocaña, a quien se acusó de complicidad en la agresión sufrida por el futbolista Salvador Cabañas, ha obtenido un amparo contra el auto de formal prisión en su contra. No había al parecer elementos para juzgarlo por el delito del que se le acusa.
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