Ahora sÍ. María ya escucha bien con el aparato.
"¡Sí oigo... oigo bien todo!", dijo María Santos García, de 47 años, luego que le colocaron el aparato auditivo y se lo ajustaron. Desde niña, María no podía escuchar bien por una enfermedad que padeció. Ella es una de las beneficiadas de las Macrobrigadas de Salud que realiza el sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), en coordinación con la Secretaría de Salud.
Feliz de la vida
A la mujer se le reflejaba la satisfacción de poder escuchar. "Desde que tengo uso de razón nunca había oído bien. Gracias doctora, les debo mucho", decía María a la doctora que le colocó el aparato auditivo, que tiene un costo en el mercado de siete mil pesos, pero lo recibió sin pagar un solo centavo.
María vive en el poblado Hidalgo, del Municipio de Madero y como carece de recursos, cuenta, nunca soñó siquiera con comprarse un aparato auditivo, pero le informaron sobre la Macrobrigada y decidió aprovechar la oportunidad.