El trabajo o el deporte son los medios de inserción social que aplica el Centro de Rehabilitación Infantil Analco (CRIA), en colaboración con otros organismos.
RESULTADOS
Al avance del año se han atendido a 188 menores en el Centro de Rehabilitación Infantil Analco (CRIA), de los cuales 86 terminaron su tratamiento residencial, dio a conocer fátima González Huízar, subdirectora de Desarrollo Humano y Familiar del DIF Municipal.
El resto fueron canalizados a otras instituciones para desarrollar un proceso diabulatorio porque no presentaban resistencia a la atención, "no hay dependencia a las drogas"; entre los sitios auxiliares están las Casas Día y Centros de Integración Juvenil (CIJ).
Los criterios de inclusión son no presentar un estado de intoxicación aguda ni golpes; el centro sólo atiende a varones.
El tratamiento residencial consiste en atención, orientación, tratamiento, cursos a los padres de familia y reinserción social. Los menores participan en competencias y actividades deportivas a través de los institutos del deporte.
Otros reciben una beca de 750 pesos por cinco horas de trabajo en la Casa Refugio Mi Esperanza, con lo que los menores se ayudan a solventar sus estudios. También se buscan caminos para que concluyan la primaria y secundaria. La condición para que mantengan sus becas es su asistencia puntual a los grupos de autoayuda.
